Con más de 30 años de experiencia en el sector, Opticalia Look, situada en Toledo, se ha convertido en la primera óptica de España en ofrecer gafas reacondicionadas. El objetivo es dar una segunda vida a lentes usadas -revisadas y reparadas- para reducir el impacto ambiental y ayudar a las personas con presupuestos limitados, ya que las monturas no tienen costo. Tan solo se paga por los cristales.
Este proyecto, pionero a nivel nacional, ayuda a la industria óptica a reducir parte de los residuos generados y también ofrece a los ciudadanos con menos recursos precios justos y competitivos. Según cuenta la directora de la óptica, Yolanda Martínez, "se trata de que todos nuestros clientes tengan acceso a una buena salud visual sin importar su presupuesto".
Martínez lleva a cabo la reparación de estas gafas en su taller propio de Toledo e Illescas, garantizando la durabilidad y el buen estado de cada producto. "En nuestras instalaciones reparamos y graduamos gafas reutilizadas de primera calidad por las que solo se pagan los cristales graduados", explica. Son lentes de segunda mano que están revisadas y preparadas para darles un segundo uso, apostando por un comercio sostenible y responsable.
"Si reutilizamos en perfecto estado móviles u otros enseres, ¿por qué no vamos a reutilizar con garantías esas monturas de calidad para presupuestos más ajustados?", señala.
Más de 30 años de experiencia
Con un equipo de siete ópticos y optometristas, Opticalia Look está presente en Toledo e Illescas y se ha distinguido en sus 32 años de vida por ofrecer un servicio personalizado a cada cliente.
"El carácter diferenciador de nuestras ópticas es que en nuestro equipo está formado por trabajadores con una amplia experiencia, especializados en el control de la miopía, terapia visual, optometría infantil, adaptación de todo tipo de lentes de contacto y cristales progresivos con la última tecnología", afirma su responsable.
Desde Opticalia Look se han llevado a cabo acciones solidarias a nivel internacional, participando en 2019 en la puesta en marcha de un taller de óptica en Camerún que no solo permitió durante su estancia en el país africano graduar a más de 500 personas, sino que a día de hoy continúa.