Si hay un segmento que no para de crecer es el de los SUV o todocaminos compactos, un nicho en el que la versatilidad y capacidades de personalización que ofrecen estos coches supone un reclamo de venta inigualable. Sin embargo, no había todavía nadie que ofreciera una variante cabrio, y Volkswagen ha “pegado” primero con el nuevo T-Roc descapotable.  Llegará al mercado la primavera del año que viene, pero ya tenemos las primeras imágenes y los primeros datos. Y no pueden ser más jugosos.

La capota, de tela como mandan los cánones de los verdaderos descapotables, se abre en nueve segundos incluso a velocidades de hasta 30km/h. La capota y su mecanismo lógicamente ocupan buena parte del maletero por lo que su capacidad pasa de los 445 litros de un T-Roc a 284 litros. El tres cilindros 1.0 TSI de 115 CV será el motor de acceso, mientras que el cuatro cilindros 1.5 TSI de 150 CV será la opción más potente. Éste podrá ir asociado al cambio DSG de 7 relaciones y la tracción integral.

 

En lugar de cortar el techo de un T-Roc, los ingenieros de Volkswagen han optado por una estructura nueva, con una batalla 37mm más larga con respecto a un T-Roc, aumentando su longitud total en 34mm mientras que el parabrisas cubre gran parte del habitáculo. El T-Roc Cabrio será el único descapotable disponible en la gama del fabricante alemán y sustituye así al Volkswagen Golf Cabrio y al Beetle Cabrio. Es la tercera vez que un fabricante intenta vender un SUV descapotable tras los fiascos de Nissan con el Murano y Land Rover con el Evoque.

Volkswagen ofrece el T-Roc cabrio, que se fabrica en Osnabrück (Alemania), con los niveles de equipamiento Style, más orientado al diseño, y R-Line, con orientación deportiva. En cuanto a conectividad, el modelo incluye (de manera opcional) los sistemas de infoentretenimiento de última generación MIB3, así como una pantalla de hasta 8 pulgadas y un cuando de instrumentos digital (opcional) de 11,7 pulgadas. Su precio podría rondar los 30 mil euros.