Las compañías del gigante asiático llevan más un año analizando distintas ubicaciones en el Viejo Continente, y el lugar donde finalmente se levante la fábrica que están impulsando estos empresarios contará con una inversión entre 800 y 1.000 millones de euros en varias etapas. Con esta llegada se consolidaría la reconversión de la industria del motor, que ha acelerado su apuesta por el coche eléctrico ante la guerra contra el diésel y el CO2 desatada por la UE y algunos gobiernos nacionales.

Castilla y León, concretamente El Bierzo en León que es donde se instalaría, tiene a su favor su ubicación cerca de varias plantas de automóviles, como la de PSA en Vigo, las de Renault en Valladolid y Palencia, la de Volkswagen de Navarra o la de Mercedes en Vitoria; por su buena red de carreteras y ferrocarril y por las ayudas que el Ejecutivo regional está dispuesto a otorgar para impulsar la transformación industrial de la zona ante la desaparición del carbón.

China es el principal mercado mundial de vehículos eléctricos. Esperan vender 2 millones en 2020 y fabrican el 61% de las baterías

Aunque Europa del Este es interesante para los grandes fabricantes de baterías chinos como AESC o Tafel por el precio de la mano de obra y la industria, lo cierto es que España gana enteros por el creciente apoyo gubernamental, el fuerte potencial del crecimiento y nuestro papel como segundo productor europeo.

Esta semana se puede dar un nuevo impulso a la llegada de la fábrica a España y a la promoción de la industria del vehículo eléctrico con la visita de entre cuarenta y cincuenta empresas pertenecientes a la asociación China EV100. Entre las firmas que estarán esta semana en España se encuentran desarrolladores de software, fabricantes de componentes, de baterías como BYD, de cargadores, de cableado interno... Las compañías chinas vienen para participar y asistir al segundo Foro de Vehículo Eléctrico Conectado y Autónomo China-España 2019 organizado por Sernauto y el Instituto de Comercio Exterior (ICEX).

La consultora IBC & Partners lleva más de un año promoviendo España como emplazamiento de la nueva fábrica de baterías ya que hasta ahora las inversiones de los grandes productores como CATL se han centrado en Alemania, donde se construyen más de 5 millones de vehículos al año y Volkswagen ya ha iniciado la reconversión de tres de sus plantas para ensamblar coches eléctricos puros.