La industria de componentes del automóvil prevé facturar entre el 20 y el 40 % menos de lo previsto para 2020 debido al impacto de la crisis del coronavirus en la fabricación de vehículos, según datos de la Asociación Española de Proveedores de Automoción (Sernauto). Desde el pasado 13 de abril, el 90 % de los proveedores de automoción instalados en España ha ido reiniciando su actividad industrial de una forma escalonada, y el 10 % restante lo hará a lo largo de mayo, según la patronal.
La vuelta a la producción ha sido gradual. En las dos primeras semanas (la del 13 y 20 de abril) para casi las dos terceras partes de las empresas la actividad ha sido menor del 40%, y solo un 15% ha tenido actividad superior al 60%. La principal dificultad con la que se han encontrado las empresas para volver a la actividad ha sido la baja demanda de pedidos (72%).
También les ha afectado la falta de suministros de equipos de protección individual como mascarillas y guantes (en el 45% de los casos) y la necesaria reorganización de los puestos de trabajo para cumplir con las normas de prevención y seguridad en el trabajo post Covid-19.
El parón provocado por el coronavirus ha hecho que el 78 % de las compañías de componentes haya presentado un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) ya sea por fuerza mayor o por causas económicas. Casi un 77% de las empresas han incluido en el ERTE a más del 60% de la plantilla y solo un 6% a menos del 40% de la plantilla.
Para el director general de Sernauto, José Portilla, estos datos reflejan la "imperiosa necesidad de que se pongan en marcha medidas urgentes de calado para impulsar la recuperación del sector y del mercado, y que la crisis no sea tan acentuada". Solo con esas medidas se podrán recuperar los niveles de empleo previos a la pandemia y mantener el liderazgo en el mundo que tanto esfuerzo ha costado alcanzar al sector de componentes.
Nissan sin piezas por los sindicatos
Nissan paralizará a partir hoy la producción de la planta de la Zona Franca de Barcelona por falta de piezas debido a la huelga indefinida que mantienen sus trabajadores en demanda de futuro. La fábrica reanudó el lunes la actividad solo para atender un pedido realizado por la alemana Mercedes-Benz de su pick-up Clase X.
Pero la protesta indefinida convocada desde el lunes 4 de mayo, coincidiendo con la vuelta a la actividad tras el parón provocado por el estado de alarma decretado el pasado 14 de marzo para evitar la propagación de la COVID-19, ha impedido el suministro de las piezas necesarias para la fabricación del citado vehículo.
Los comités de Nissan en Barcelona han convocado la huelga indefinida en las plantas catalanas para exigir un plan industrial que garantice el futuro de la compañía en Cataluña, que podría conocerse el próximo 28 de mayo, cuando se reunirá la dirección de la multinacional nipona.