Primero fue el libro publicado en el año 2015, escrito por el periodista, actualmente reportero de El País, Nacho Carretero (La Coruña, 1981). Después la serie en Antena 3 y luego, el año pasado esta novela gráfica con guión y dibujos de Luis Bustos (Madrid, 1973). El libro fue secuestrado por orden de una juez consiguiendo con ello una publicidad añadida que el autor agradece irónicamente en su epílogo a esta edición gráfica.
Fariña, una denominación folclórica de la cocaína en gallego que el autor confiesa apenas se usa en el ámbito del narcotráfico, cuenta la historia del narcotráfico en Galicia, que alcanzaría su máximo apogeo en los años ochenta del siglo pasado cuando, primero el hachís del norte de África y luego la cocaína colombiana, sustituirían al tradicional contrabando de tabaco de las rías gallegas con especial incidencia en la de Arousa y en la costa de la Muerte.
Las nuevas generaciones dieron el salto y de allí surgirían los Laureano Oubiña, Sito Miñanco, el clan de los Charlines, Marcial Dorado, Sito Carnicero, Manuel Carballo, Luis Falcón “Falconetti”o el clan de los Lulús. La conexión y el hermanamiento con los cárteles colombianos, principalmente con el de Cali, se produciría en las cárceles españolas donde los contrabandistas de tabaco y los nuevos amos de la cocaína americana coincidieron.
En esos años ochenta se produciría una connivencia de una buena parte de la sociedad gallega que afortunadamente se rompería cuando los estragos de la droga extendida entre la juventud produjo una reacción social que puso en su sitio a esos narcotraficantes, muchos de los cuales, a la manera de su referente Pablo Escobar, buscaron en el populismo a lo Robin Hood el lavado de su imagen.
Vendrían entonces las grandes operaciones contra el narcotráfico como la operación Nécora, los arrepentidos y desde luego, la lucha de una mayoría de la sociedad contra una manera de vida que en algunos momentos se rodeó del prestigio del dinero fácil y el aparente triunfo.
Sin embargo, el narcotráfico no cesó tras la operación Nécora y los nuevos clanes se multiplicaron adaptando el negocio a las necesidades de unos cárteles colombianos que a pesar de buscar nuevas rutas y nuevos socios en África y en Europa, siempre tuvieron en Galicia unos socios serios y fiables. A pesar de operaciones como la Tabaiba que desmanteló la estructura de lancheros en 2009, el autor advierte de que ni mucho menos el narcotráfico es algo del pasado en Galicia.
Excelentemente dibujada, Fariña, la novela gráfica que lleva como subtítulo “Historia e indiscreciones del narcotráfico en Galicia”, resume con el lenguaje del cómic lo que indudablemente fue un éxito en su primera versión y en la serie de televisión.
Luis Bustos, según el libro de Nacho Carretero. Fariña, la novela gráfica. Epílogo de Nacho Carretero. Ediciones Plan B, 2019. 128 páginas. 18,90€.