Ahora que la Biblioteca Castro ha comenzado a editar la ingente obra periodística de Álvaro Cunqueiro, recupero estos cien artículos escogidos por Dolinda Rivera Pedredo publicados en La Voz de Galicia entre 1952 y 1959. En ellos nos podemos reencontrar con el mundo y los temas que recorren toda su obra. Así y como cabía de esperar el primer gran apartado, De mi país, está dedicado a esa Galicia literaria; una sociedad rural, de mentalidad arcaica y mágica, por la que desfilan santos, milagros, demonios y prodigios. Ese universo gallego cunqueiranomítico que llega al presente y está lleno de leyendas, fábulas y magias.
No importa a veces que la fuente sea su propia fabulación y no la tradición y que en el retrato de sus criaturas, reales e imaginarias. Como marca el título de su segundo apartado, Retratos imaginarios, aparecen junto al histórico maestro Mateoo Rosalía de Castro su querido Merlín o las islas de Utopía. Ya se sabe que para Cunqueiro la única veracidad es la que marca la imaginación y la buena literatura. Y en ese mundo, la universalidad se da en traer a Galicia y con los gallegos al Dante, a François Villón o a los trovadores de la Bretaña.
Por eso, su Tiempo presentees un tiempo especial en la que la Navidad o un viaje a su pueblo, Mondoñedo, se impregna de la magia del territorio cunqueirano del que surgen todos sus sueños. Ese contraste con el presente, lleno de agitación, le sirve para volver sobre sus demonios preferidos, esa demonología a la que atribuye prodigios y que tiene en los demonios inventados como Croizás, Cobillon, Tadeo, Ismael Florito o don Juvenilio Caraffa algunos de sus máximos representantes.
EnEl mundo y su sombra, con títulos como Dudas y muerte de Hamlet, Otoño con Juan Ramón, Un diablo menos por San Juan, Tiempo de vendimia o Al alba en Betanzos se recrean algunos de los temas que una y otra vez repetiría en su obra como su afición a los pintores y los poetas del Renacimiento italiano, a los héroes caballerescos o a los paisajes míticos del Atlántico.
Y es que como concluye la autora de la selección: “En definitiva, la dinámica mental de Álvaro Cunqueiro Mora se perfila entre el reconocimiento de una realidad en que es imposible la realización de la Edad Dorada, de los más queridos y hermosos sueños o ideales, de los múltiples deseos e identidades del ser humano, y de ahí que se vayan acumulando en el vagar de sus páginas una inmensa soledad. La voluntad de de transcender lo limitado e insatisfactorio de la realidad, de inventar y descubrir con la imaginación propia la cara y el revés de las cosas, de concederse el privilegio de soñar y de soñarse –al modo quijotesco y de acabar en la paz de la imaginación. En unos tiempos en los que la literatura se entiende como documento y que hasta la poesía se extingue de inmediato, nuestro creador busca y halla refugio en un mundo inventado, lejano en el tiempo. Volvemos pues a una literatura limpia que regresa al origen, a la fábula. Pero Cunqueiro no se desentiende del ser humano ni de sus problemas. La muerte, el amor, el odio, la soledad, aparecen siempre en algún recodo.”
Álvaro Cunqueiro. 100 artículos. Selección e introducción de Dorinda Rivera Pedredo. Editorial La Voz de Galicia, 2001. 190 páginas