Miguel Ángel Sánchez, presidente de la Plataforma para la defensa del Tajo y del Alberche, además de concejal de Talavera de la Reina por Ganemos, Podemos, o alguna de esas confluencias del marasmo en que se ha convertido el batiburrillo del 15-M, gracias al leninismo 2.0. de Pablo Iglesias el de Galapagar, ha escrito un artículo en este digital, con el que uno coincide totalmente en su título y un poco menos en su análisis: “Vascos y el barco de la demagogia”. Miguel Ángel se olvida de algo que uno cree que es fundamental en todo lo que ha ocurrido desde que el PSOE de Álvaro Gutiérrez consiguió la Presidencia de la Diputación, gracias al apoyo decisivo de Ciudadanos, entonces presidido por el difunto Antonio López: voluntad política.
Es una verdad incontestable, ratificada por los tribunales de justicia, que no todos los trámites administrativos para poner en valor Ciudad de Vascos en tiempos de Arturo García Tizón se hicieron correctamente. No se valoraron las dificultades que entrañarían las expropiaciones necesarias para llevarlo a cabo y quizás hubo precipitación, y algo de prepotencia, en el proceso. Eso sí, la Diputación que presidía García Tizón tenía la voluntad política de dotar a la Jara y a la zona de Talavera de un proyecto que dinamizara uno de los territorios más deprimidos de la provincia de Toledo, junto con la Sierra de San Vicente, dos comarcas, “casualmente” pertenecientes a la zona de influencia de Talavera. También es incontestable que la voluntad política del equipo de gobierno PSOE,IU,Cs, desde el primer minuto fue la de liquidar el “yate”, “buque” de Tizón, como si del Azor del innombrable se tratara.
Ahora Miguel Ángel plantea que ese “yate” de Tizón debería estar surcando las aguas del Tajo desde Talavera la Nueva hasta Azután, con grupos de turistas fotografiando grullas, cormoranes, garzas, patos y garcetas, gozando de la fauna de sus islas y dinamizando sus riberas, y uno no tiene otra que darle todo mi apoyo. Si la razón para que no esté en el Tajo el barco es el uno por ciento no navegable de la desembocadura del Uso, hay otro noventa y nueve por ciento del reculaje del embalse de Azután navegable para el turismo de naturaleza que Miguel Ángel ahora plantea con toda lógica, pero un poco tarde. A la legislatura le quedan tres meses, el barco está varado en Ribadeo y sometido a un proceso de subasta a la baja con un plazo de un año por delante que quedará como herencia envenenada para la próxima corporación provincial.
Y es que lo que en realidad le ha faltado al tripartito antitizón para impulsar un proyecto para dinamizar el Tajo, aguas abajo de Talavera, ha sido simplemente voluntad política. Y de nada sirve ahora que Cs amague con una moción de censura contra el presunto regenerador, o el verso libre de Ganemos, Podemos, todas sus confluencias y de los grandes Expresos europeoS, nos diga ahora también lo bien que quedaría el “yate de Tizón” navegando el Tajo. Sobró odio político contra una persona y faltó voluntad por ayudar a la Jara.