Hay proyectos en España que uno no sabe bien porqué no salen adelante. En Talavera saben un poco de ello. No hay manera de que todo el mundo empuje en la misma dirección y uno no sabe las causas. El Camino Real de Guadalupe es uno de esos proyectos que uno teme acabarán consumiéndose por sí mismos entre la indiferencia o la falta de apoyo real. Encima la jodida pandemia todo lo trabuca y enreda.
El otro día se daba la noticia de que las Oficinas Postales Vaticanas habían realizado un matasellos y unas tarjetas postales que se expenderían durante un mes con la conmemoración del Año Jubilar Guadalupense y a uno le pareció, con el debido respeto a las jerarquías de la Iglesia Católica, una verdadera broma. Si esa va a ser la aportación material que desde El Vaticano va a llegar para conmemorar el año jubilar e impulsar el camino, estamos arreglados. Claro, que al menos la ayuda espiritual, en este caso se da por incluida y no habrá problemas para que al comprador de los sellos, debidamente matasellados, le incluyan en el precio unas cuantas indulgencias. Del Año Jubilar Guadalupense, por esa vía y con un poco de suerte, acabarán enterándose unos cuantos miles de filatélicos, un gremio que se distingue de toda la vida por el amor a la aventura, al viaje y al peregrinaje laico y de a pie.
Claro, que uno después de cómo el actual Papa pasó olímpicamente de la celebración del Centenario de Santa Teresa, ya no se extraña de nada y espera muy poco también de esa parte, aunque el bueno del arzobispo Cerro trate de vendernos que en Roma no piensan en otra cosa que en Guadalupe.
Así que si los del gremio de la cosa espiritual despachan el asunto con un matasellos y una tirada de quinientas postales en color para ser expedidas en las oficinas del Correo Vaticano, no se extraña uno que en la cofradía de los políticos las cosas no vayan por mejor camino y en los Presupuestos Generales del doctor Frankestein hay desaparecido una partida de medio millón de euros que vendría a impulsar la iniciativa del Camino Real, según ha denunciado la diputada por Toledo Carmen Riolobos.
A uno se le antoja que para estos tiempos de presupuestos de Pedro y Pablo lo de Camino Real no cuadra mucho. Lo de los Reyes Católicos como imagen del viaje a Guadalupe por esos caminos de La Jara, no cuadra. En estos presupuestos todo lo que suene a Corona, a monarquía y a comarcas como las de Toledo y Cáceres que atraviesa esa camino no tiene asiento. Camino Republicano es la solución.