SÁNCHEZ DEBE SER DIMITIDO - Roberto (24 de octubre de 2018)
El oprobio y la desfachatez con la que un día tras otro nos encontramos con el Doctor Fraude, alías Sánchez, y su gobierno de multimillonarios, no alcanza límites.
No tengo nada en contra de los multimillonarios, mientras lo hayan conseguido con su esfuerzo, riesgo y honradez, y no lo oculten.
Su última aparición estelar tuvo lugar en el día de ayer al amenazar, porque es lo que hace este chulo de barrio, en el Congreso a otro diputado sembrando dudas sobre su doctorado –no el de cum fraude, que no habla de él-.
Parece que dedica su tiempo y el de los demás, a parte de nuestro dinero, a escarbar en los master y doctorados de la oposición a ver si encuentra alguno parecido al suyo: plagiado y hecho por un negro, aunque supongo que sería blanco.
Su desfachatez, ignorancia y maldad – de la que anda sobrado- le ha llevado a mentir nuevamente, como algunos medios se han encargado de demostrar. Supongo que el afectado cuando tenga ocasión le espetará en su cara bonita: ¡usted es un embustero, un fraude en sí mismo y un peligro para la convivencia de España!
Lo dije hace tiempo y lamentablemente no me he equivocado. Vino para quedarse y le importa un bledo quién le apoye, ya sean comunistas populistas, golpistas o nacionalistas y proetarras.
Todos juntos forman lo peor de este país, que parece dormitar esperando que alguien venga a quitarles este mal sueño, que más bien es un anuncio de lo que nos espera de mantenerse en el poder con los amigos de la dictadura bolivariana y los racistas –al menos así lo calificó Doctor Cum Fraude- a los inquilinos de la Generalidad de Cataluña.
Está en manos de un peligroso amigo de la narcodictadura bolivariana , y encima esos pretenden legalizar la marihuana. Tiene bemoles la cosa que prohibamos fumar, pero legalicemos las drogas. Que ese vicepresidente oficioso repruebe al Rey y hasta proponga la censura y que no sean delito las injurias a la corona, la religión y no sé cuántas mamarrachadas más, mientras calla cuando tiran por el balcón a un concejal en la narcodictadura bolivariana para disimular las torturas a las que fue sometido.
De los medios vendidos a este engendro mejor no hablar.
Señores y señoras –no se me solivianten las feminazis-, hay que dimitir a este Fraude de Presidente y su corte o nos veremos machacados por la peor de las dictaduras: la comunista, ya que de los otrora “opositores” del PSOE a Cum Fraude nada hay que esperar, no sea que se les mueva el culo del puestecito.
Mañana será tarde.