Debemos proteger la diversidad. La ideológica. La natural. Y la intestinal. Los grupos humanos donde no se impone una determinada ideología, se autocorrigen y funcionan mejor. La naturaleza seguirá siendo acogedora si reducimos la extinción de especies. Y en el intestino pasa lo mismo. Si nuestra flora intestinal no está deteriorada, es decir, si las bacterias que trabajan dentro de nuestros intestinos hacen lo que tienen que hacer, todo va mejor, incluso, la sangre circula mejor, y el peso aumenta menos (...).
Dicho esto, voy a reproducir lo que decía un biólogo hace poco: «Todo va más bien, si nuestras entradas corporales y nuestras salidas están practicables. Todo va mejor si la sangre y los demás fluidos, se desplazan sin interrupciones. En la naturaleza, pasa lo mismo: Todo va mejor si no interrumpimos los cursos de agua ». Dicho esto añado: Las aguas estancadas, terminan haciendo mal olor, pues, tienen dificultades para autodepurarse. Podemos decir lo mismo de los grupos humanos estancados. Se pueden decir muchas cosas contra el estancamiento. Evitar el estancamiento, equivale a defender la libertad, y proteger la pluralidad. Necesitamos gobiernos progresistas.