La historia se repite, pero con los papeles cambiados.
Según reflejan los medios de comunicación, los actuales responsables de la marcha económica del ayuntamiento de Talavera de la Reina, que representan a las mismas siglas que los que cedieron su representación al equipo de Don Florentino Carriches, se encuentran en parecida situación. Aquéllos se hicieron cargo de una deuda incontrolable y tuvieron que poner todos los medios a su alcance para afrontar tal situación. Juntos con los técnicos del ayuntamiento, tras estudios exhaustivo, se llegó a una conclusión con una medida de ingeniería financiera que consistió en lo que se le dio la denominación de Plan de Quita. La fórmula, muy fácil. Se procedió a recurrir a un endeudamiento, al que de forma consensuada e indirecta, colaboraron los propios acreedores.
Ahora, cogen el bastón de mando quienes entonces lo cedieron y como es lógico, para la buena marcha contable, tendrán que afrontar las deudas que dejaron los anteriores.
Conclusión: Permitan los políticos que quienes elaboren los presupuestos, sean los técnicos. Éstos saben que los presupuestos se basan en los ingresos previstos y con éstos, proceder a presupuestar los gastos. No al revés, que es normal que los gastos se puedan incrementar, no así los ingresos que normalmente se quedan cortos. Así, la deuda acumulada, por supuesto, se incrementa.