La Administración destinó entre los años 2019 y 2022 más de 6.200.000 euros en subvenciones públicas a grandes latifundios en España por parte de la Dirección General de Política Comunitaria (PAC), Ministerio de Agricultura y Administraciones autonómicas, según un estudio realizado por PACMA, el partido político que trabaja por los derechos de los animales y la defensa del medio ambiente. Entre estas grandes fincas de todo el territorio del Estado destacan varias ubicadas en Castilla-La Mancha, no en vano es una de las comunidades autónomas, junto con Extremadura y Andalucía, con un número más elevado de grandes fincas en España, la mayoría con una importante actividad cinegética.
Destaca en la región la finca El Castañar, ubicada en la localidad toledana de Mazarambroz, propiedad de los hermanos Rafael y José María Finat, hijos de José María de la Blanca Finat y Escrivá de Romaní, también conocido como “conde de Mayalde” y alcalde de Madrid entre 1952 y 1965. El Castañar, con una extensión de 11.500 hectáreas divididas entre los dos hermanos, recibió durante el periodo analizado por PACMA más de 2.460.000 euros en concepto de 85 ayudas y subvenciones de las diferentes administraciones. La finca organiza monterías y es posible alquilarla para cacerías o visitas y excursiones. Destaca asimismo su alta población de águilas y dentro del terreno se erige un palacio homónimo.
Otra de las grandes fincas de Castilla-La Mancha que recibieron igualmente importantes subvenciones públicas es “La Garganta”. Situada en la localidad ciudadrealeña de Fuencaliente, la propiedad -heredada de su padre por el joven duque de Westminster, Hugh Grosvenor, uno de los hombres más ricos de Inglaterra- tiene una extensión de 15.000 hectáreas. Lugar de caza favorito de las casas reales europeas, en sus instalaciones cuenta con palacios, helipuerto, una iglesia, una escuela e incluso un hospital de primeros auxilios. En la finca se concentran ciervos, jabalíes, perdices, aves rapaces y una importante población de lince ibérico. “La Garganta” recibió, en cuatro años, más de 1.400.000 euros de fondos públicos a través de un total de 75 subvenciones.
Por su parte, la finca “El Lobillo”, en Alhambra (Ciudad Real), una macrofinca de caza de 10.000 hectáreas propiedad de Juan Abelló, otra de las grandes fortunas de nuestro país con un patrimonio de 2.800 millones de euros de acuerdo con Forbes, recibió subvenciones públicas por valor de 753.000 euros. El rey emérito Don Juan Carlos solía compartir cacerías con Abelló, quien está considerado uno de los mejores cazadores de España y tiene otras propiedades para tal fin además de El Lobillo.
En el caso de “El Castaño”, una propiedad de la familia Botín en Luciana (Ciudad Real) de 9.600 hectáreas -contando también con la propiedad colindante "Santa María", perteneciente a Ana Patricia Botín- percibió subvenciones públicas durante dicho periodo por valor de 242.200 euros, según el estudio de PACMA. El enclave cuenta además con un aeródromo, una casa principal y otras residencias.