El PSOE de Castilla-La Mancha se ha opuesto desde siempre a la instalación en nuestro territorio del Almacén Temporal Centralizado de residuos nucleares. También el PP se opuso en su momento, pero cuando Cospedal se hizo con el gobierno, cambió de posición y ofreció al ejecutivo nacional de Rajoy una solución casi perfecta mandando el ATC a una zona de Cuenca desierta y extremadamente necesitada de actividad económica y puestos de trabajo. En Villar de Cañas lo recibieron con los brazos abiertos pero cambió de signo el gobierno autonómico y volvió la guerra oficial e institucional contra el silo nuclear.

Page se ha propuesto a toda costa, más por principios ideológicos y presión de la izquierda que por convencimiento personal, impedir que el ATC se instale en Cuenca y para ello echará mano de todos los recursos que estén a su alcance.O aunque no lo estén, como era el caso de la ampliación del área de protección de las aves de la Laguna del Hito, que los tribunales han descartadado por su evidente mala intención. O buena, pero falsa.

Ha sido solo un contratiempo porque el ejecutivo de Page tiene un arsenal de recursos contra el ATC que piensa utilizar. Lo ha dejado muy claro este fin de semana el consejero de Agricultura y Medio Ambiente, Francisco Martínez Arroyo, en la entrevista que ha publicado Europa Press. Aparte de que el consejero se ha mostrdo absolutamente convencido de que si vuelve a ganar el PP el proyecto del ATC prosperará definitivamente, Arroyo ha enumerado las distintas opciones que aún tiene su gobierno para impedir que la obra se lleve a cabo.

Arroyo ha recordado que existen otras trabas para que el proyecto no salga adelante, como que la localidad "carece de Plan de Ordenación Municipal", sin el cual "no se puede hacer la obra". Además ha recordado que "existen informes técnicos de Enresa que demuestran que Villar de Cañas no es el lugar más idóneo para la instalación", así como informes geológicos que indican "que los suelos son de yeso y es difícil cimentar".

"Pero si el Gobierno central quisiera seguir apostando por un proyecto que no cuenta con el respaldo de la región, recurriríamos a las instancias europeas, porque entendemos que es nuestra obligación salvaguardar la protección del espacio natural", ha manifestado.

El titular de Agricultura ha propuesto como alternativa a la necesidad de construir un almacén de residuos nucleares no ampliar la vida útil de las centrales nucleares. "El Gobierno ha tomado esta decisión sin necesidad aparente. Si se alarga su vida, hay que buscar una solución a los residuos que se van a generar", ha avisado.

En la misma línea, ha remarcado que algunas centrales "están construyendo almacenes temporales para resolver sus problemas de residuos".

La guerra siga abierta, aunque Villar de Cañas haya ganado la primera batalla.