La periodista Carmen Lucas-Torres sigue informando en El Españoldel golpe del presunto estafador Francisco Jesús Cuesta, que está siendo investigado porun juzgado de Villarrobledo (Albacete) después de haber dejado sin pagaralrededor de un millón de euros a una treintena de agricultores, transportistas, bodegas y empresas de suministro de toda Castilla-La Mancha durante la pasada vendimia. "El comercial habría cerrado acuerdos en nombre de la falsa bodega Montesclaros SL, con sede en Sacedón (Guadalajara), para comprar cientos de miles de kilos de uva, embotellarlos y enviarlos a China. Se llevó la producción, pero nunca la pagó", asegura el diario de Pedro J. Ramírez.
Entre los afectados por los impagos de Paco Cuesta figura, según El Español, la Asociación Apostólica Reina de los Ángelesde Daimiel (Ciudad Real), una institución diocesana que lleva a cabo su labor social en el mundo rural, ayudando a personas con drogadicción a través de una casa de su propiedad cedida a 'Proyecto Hombre' desde hace años o dedicando fondos a apoyar a familias con pocos recursos económicos.
La Asociación, según esta información, se nutre de las aportaciones de donantes, algunos de los cuales han cedido sus herencias o terrenos para que sean explotados. "Precisamente de ahí proceden las hectáreas de viñedo que los responsables de Reina de los Ángeles encargan vendimiar a terceros todos los años y que le traen importantes ingresos para el resto del curso. Unos ingresos que ayudan a mantener sus proyectos sociales", añade.
El Español ha tenido acceso a la denuncia que presentó la directora de la asociación, Rosa María Cobos, el pasado 12 de agosto en la comisaría de la Guardia Civil de Daimiel contra el comercial. Según el documento, el hombre se presentó al bodeguero de la localidad que recepcionaría las uvas de la asociación y le hizo una oferta económica para llevárselas a su supuesta bodega. El total de las toneladas recogidas ascendió al final de la recolecta a más de 107.000 euros. El bodeguero y el presunto estafador firmaron un contrato pero éste nunca lo entregó y tampoco pagó. Igual que con el resto de afectados, fue poniendo excusas. "La fecha para hacer entrega de los documentos de pago cada vez se retrasaba más y más. Finalmente, en diciembre de 2018, acudió por las instalaciones del bodeguero para, creíamos, cerrar la operación de compraventa y hacernos entrega de los documentos de pago finalizando nuestra relación comercial", explicaba la responsable de la asociación en la demanda. "Dentro del plazo para realizar la declaración de cosecha, nos encontramos con la sorpresa de que parte de nuestras uvas habían sido destinadas a otras bodegas para ser elaboradas en ellas", denunció Cobos.
Por último, El Español alerta de que los afectados han advertido a la Guardia Civil de que "el comercial y sus dos socios, a los que también piden investigar, han fundado en 2019 otra mercantil, Finca La Encomienda SL". "Pensamos que podría ser la prolongación en el tiempo y en el ánimo de los hechos descritos y realizados por la empresa Montesclaros", añaden los estafados para evitar más casos como los suyos y ahorrar este tipo de disgustos a más castellano-manchegos en la vendimia de este año.