Soluciones urgentes y eficaces para el pueblo de Castilla-La Mancha más acosado
El tremendo reportaje publicado este miércoles por EL DIGITAL CLM y EL ESPAÑOL sobre la caótica y difícil situación que atraviesa la localidad guadalajareña de Horche, acosada por una ola de delincuencia y “okupado” por una multitud que siembra el miedo entre los vecinos, exige una importante dosis de atención por parte de los Gobiernos central y autonómico. Lo que está viviendo Horche, según denuncia este reportaje, no es una situación cualquiera que pueda resolverse sola, sino que se trata de un gravísimo problema que requiere soluciones tajantes e inmediatas. Los vecinos están hartos y atemorizados y el pueblo vive entre la desesperación y la tensión, sufriendo robos y en medio de un clima enrarecido que ya es insoportable.
A pesar del esfuerzo de las Fuerzas de Seguridad, los vecinos no lo están pasando bien. Están atemorizados y se sienten abandonados a su suerte. Apelan directamente a los Gobiernos de Pedro Sánchez y Emiliano García-Page para que afronten la situación y tomen medidas urgentes. El relato de los habitantes de Horche desvela una situación insostenible a la que es urgente poner coto y hacerlo de la manera más rápida y contundente posible. La delincuencia y la “okupación” son un grave problema en este municipio de la provincia de Guadalajara que está pidiendo socorro y lo hace, además, de una manera desesperada. “Robos, caos y miedo” son las palabras que, según los vecinos, definen la situación que se vive en Horche: “El problema no es la okupación en sí. El problema son los delincuentes”, denuncian claramente.
La tensión es palpable y hay que atajarla de inmediato desde las Administraciones Públicas. Unos vecinos en pie de guerra no es el mejor modelo de convivencia para una sociedad tranquila como es la de Castilla-La Mancha. Y lo que está viviendo este pueblo de 2.500 habitantes no puede ser la tónica normal en el día a día de los vecinos. El Gobierno debe tomar medidas con urgencia y devolver la normalidad a Horche. No sólo es urgente. Es de justicia.