Por si los efectos del ERE tras la fusión de Unicaja y Liberbank fueran poco problema se le abre un nuevo frente a la entidad en la que se que se integró la antigua Caja Castilla La Mancha. Un sindicato minoritario de Liberbank -Corriente Sindical de Izquierda (CSI)- ha presentado una denuncia ante la Fiscalía por el dividendo que aprobó el consejo con las cuentas de 2020, según ha publicado este fin de semana El Confidencial.
El sindicato estima en su denuncia que la reexpresión de cuentas que forzó a hacer la CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores) a Liberbank hace algunos meses, reduciendo el beneficio anunciado de 2020 en un 60%. Pasó de los 41 a los 16 millones por la mala contabilización de un pago de 43 millones realizado por la aseguradora Caser.
Según la denuncia que publica EC, Liberbank habría aprobado en junta de accionistas un dividendo de ocho millones conforme al beneficio de 41 millones, que cuando se redujo no implicó ningún tipo de medida nueva: "De lo anterior se desprende que Liberbank acata el criterio de la CNMV en cuanto a periodificar la comisión percibida de Caser durante un periodo de 10 años y se asume que los beneficios de 2020 serían inferiores a los declarados. No obstante, no se rehacen las cuentas anuales ni se propone devolución alguna del dividendo indebidamente repartido, ni se propone minoración alguna en futuros dividendos que puedan compensar el que no se debía haber pagado".
El pasado mes de julio, el citado sindicato hacía públicas unas duras críticas al entender que "mientras los trabajadores seguíamos sometidos a recortes fraudulentos, inmorales e ilegales (...) Liberbank presentaba otra contabilidad falsa que permitía eludir los límites del BCE para el pago de dividendos, de manera que los fondos buitre, los especuladores profesionales (...) se han embolsado (...) mucho más dinero del que les correspondía".
En ese sentido, Liberbank justificaba su actuación diciendo que "la interpretación contable de la CNMV" no tiene "un impacto económico adverso en la actividad de las operaciones", "dado que no afecta a la generación de flujos de caja, no genera obligaciones de pago adicionales y no afecta a la capacidad del grupo para cumplir con todas sus obligaciones financieras".
La denuncia de CSI se dirige contra Manuel Menéndez, consejero delegado de Liberbank y ahora de Unicaja Banco, y contra el consejo que lideraba en el banco en el que se integró CCM.