El lugar para debatir los presupuestos está en las Cortes y no en la tele como quiere García Molina
Es conocida la vieja obsesión de Podemos por los medios de comunicación y especialmente por la televisión, un gusto mediático que este partido intenta potenciar al máximo de sus posibilidades y con el que quiere tener influencia directa sobre los ciudadanos. El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha demostrado ya en numerosas ocasiones una mayor querencia por la tele, los medios y la calle que por el Parlamento y las instituciones democráticas y ese impulso lo tienen también muy heredado algunos líderes territoriales que, como José García Molina en Castilla-La Mancha, ponen de relieve el uso de este mismo modelo de hacer política. La televisión pública de Castilla-La Mancha es una de las prioridades de García Molina desde el comienzo de la legislatura y, a medida que avanzan los meses, el líder regional de Podemos no se despega de esta pulsión televisiva y mediática. La gusta más la tele que las Cortes, que es la sede de la soberanía popular y el órgano máximo de representación democrática de la gente.
En este contexto, resulta significativa la insistencia del diputado, portavoz y secretario general de Podemos Castilla-La Mancha en debatir sobre los presupuestos de la Junta con el presidente, Emiliano García-Page, pero no en las Cortes autonómicas, como sería lo normal en un debate de tal envergadura, sino en la televisión regional. El show es el show. Este martes volvió a insistir García Molina en su propuesta de montar un debate televisivo para hablar con Page y también con el Partido Popular sobre el bloqueo actual que sufren las cuentas públicas de la región y analizar las causas y consecuencias de esta complicada situación. Una iniciativa que tiene su interés y su importancia pero que sería mucho más adecuada en las propias Cortes de Castilla-La Mancha y con todos los medios allí presentes, la televisión pública entre ellos. Luz y taquígrafos, transparencia total, debate completo y en directo: sí, pero en el Parlamento y con todos los medios públicos y privados presentes, y no sólo uno en el que tan cómodo parece sentirse el hombre de Pablo Iglesias en Castilla-La Mancha. En las Cortes regionales están sentados los representantes de todos los castellano-manchegos, García Molina entre ellos con sillón, sueldo y despacho oficial.
No queremos decir con este planteamiento que no deban hacerse debates televisados y que esta no sea una buena fórmula, especialmente en las campañas electorales, pero no entendemos la insistencia de García Molina en debatir con Page en la televisión castellano-manchega cuando existen fórmulas mucho más apropiadas para plantear un debate de estas características en las Cortes y con un modelo abierto de intervenciones, réplicas y contrarréplicas. Debate sí, pero mucho mejor en el Parlamento que en la tele. En las instituciones que en los medios. Es lo suyo.