No deseo hacer de este artículo de opinión literatura dulzarrona alrededor de un nombre. No voy a utilizar la torpeza de sentirme condicionada por la circunscripción provincial, porque ya hace bastante más de treinta años que se ordenó la territorialidad de Castilla-La Mancha y su ámbito de actuación, con la composición de cinco provincias.

Como quiera que siempre he sido incapaz de utilizar la conveniencia personal a la hora de medir riesgos por opinar o decantarme por un candidato, seguiré expresando mi pensamiento con la misma claridad que lo he hecho hasta ahora.

Miren, si algo he aprendido de la política, es que a los buenos líderes no hace falta venderlos porque sobresalen de la media y se venden por sí mismos. Los que llevamos militando desde que el PP se denominaba AP, solemos ser buenos “oteadores” y se nos escapan muy pocos.

Cuando se trata de valorar la idoneidad de un candidato,  que de salir electo, se va a enfrentar a  conducir el timón del PP en Castilla-La Mancha con la responsabilidad que ello entraña, se debe ser cauto y exigente, sin tener en cuenta otras consideraciones secundarias que no sean las de seriedad, preparación y competencia.

Descubrí a Paco Núñez hace aproximadamente diez años en la celebración de un congreso de Nuevas Generaciones, que transcurría en la Universidad de Castilla-La Mancha y confieso que me llamó la atención su desparpajo, su simpatía y su nivel político con una edad tan temprana, pues no tendría más de veintiséis años.

Después,  le he seguido y mi ojo clínico no me ha traicionado, pues aquel chico espabilado que me llamó la atención en un congreso de Nuevas Generaciones, ha ostentado los cargos de Alcalde Almansa (con dos legislaturas por mayoría absoluta), Presidente de la Diputación de Albacete, Presidente de nuestro Partido en Albacete y profundo conocedor de las  claves autonómicas institucionales y políticas.

Un buen bagaje político con altura de miras, que hacen de Núñez el candidato perfecto para afrontar los próximos retos de nuestro partido y nuestra comunidad.

Padre de familia numerosa con 36 años, Paco Núñez no tiene aristas en su mochila, proyecta conciliación, transparencia e ilusión, y un sentido de la unidad de partido que le lleva a abrir los brazos a todos los militantes sin distinción, cualidades que me facultan para decir alto y claro, que yo apoyo a Paco Núñez.

Valle Arcos Romero. Concejal del Grupo Municipal Popular de Toledo