Este domingo cerrábamos cuatro días de trabajo en la V Asamblea Nacional de Ciudadanos–Partido de la Ciudadanía. En la misma hemos demostrado quienes somos y porqué lo somos, y hemos sacado una serie de conclusiones que creemos importantes, tanto para nosotros como para la sociedad española.
Para empezar, somos un partido de optimistas. Vivimos en una sociedad con 40 años de bipartidismo, un bipartidismo que ha creado redes clientelares, y donde los partidos pequeños hemos tenido que luchar por conseguir una mayor cobertura mediática. Además, observamos con preocupación el ascenso de grupos radicales, llenos de odio a todo aquel que no piense como ellos y que jalean soflamas de los años 30.
Nosotros somos un partido moderno, del S.XXI, que no comparte que aquellas teorías que nos han traído a esta situación nos aporten nada nuevo, no creemos que la solución sea “más de lo mismo”. Sabemos que no lo tenemos fácil, siempre hemos demostrado que Ciudadanos se hace más fuerte ante las adversidades, seguimos resurgiendo con fuerza, sobre todo porque creemos en nuestro proyecto, y creemos que es el mejor para España.
Hemos salido de la Asamblea más reforzados que nunca, una Asamblea donde hemos debatido, donde se han evaluado formas diferentes de ver la política y el propio partido, pero donde todos tenemos algo en común: España solo se levanta desde la unidad y desde el firme convencimiento de que todo el que quiera sumar tiene que arrimar el hombro desde la moderación y no desde la confrontación.
A nivel interno hemos asumido tanto errores como aciertos, que hemos reflejado en los nuevos Estatutos, más sencillos, más modernos, más pendientes del afiliado, y de las agrupaciones más rurales. Hay más herramientas de comunicación interna, más defensa del afiliado, verdadero pilar del partido, y hemos hecho una autocrítica tan grande y única en la historia política de este país, que ha sido capaz de hacer que un presidente y la mayor parte de su ejecutiva dimitieran, dejando en evidencia al resto de políticos nacionales atados a sus poltronas.
Ahora comenzará la renovación desde las bases, eligiendo nuevas juntas directivas, agrupaciones, comités provinciales y regionales.
Ciudadanos vino de la sociedad civil y ahora vuelve a la misma, a ser el partido del talento sobre todas las cosas, de los autónomos y pymes, de los agricultores y ganaderos, en definitiva, de la clase media, a la que no paran de apalear desde hace años. Ciudadanos debe ser ese foco de unión de los moderados, de los liberales, de los optimistas, de los trabajadores, de las personas con conciencia social y sobre todo de los que pensamos que España tiene solución, que no tiramos la toalla, porque si volvemos a las antiguas políticas, ya sabemos a dónde nos llevarán, y luego, ¿nos seguiremos quejando? Dejemos la queja y tomemos las riendas de nuestra vida, de nuestra sociedad y de nuestra política, porque por encima de todo, somos Ciudadanos iguales, y sobre todo libres.
Alejandro Ruiz. Secretario de organización de Ciudadanos en CLM