En esta nefasta situación que estamos viviendo desde el mes de marzo, tanto económica y socialmente, nos encontramos con la picaresca del poderoso.
Nos han mandado a una situación laboral penosa a la población activa que son los llamados ERTE’s forzosos para salvar los necesarios empleos que son el sustento de la sociedad para continuar con “normalidad” sus vidas.
Hasta ahí, se ha llevado a cabo una gran acción del poder político para ayudar y salvar así al mismo sector empresarial del cierre de sus negocios, por lo tanto, a todas las familias de las personas trabajadoras y autónomos que se han visto afectados de lleno por la situación para no verse sin sustento económico para vivir y hacer frente a las obligaciones económicas mensuales y a su vez, para no crear una bola de deudas que aplastaría el presente de los ciudadanos.
Pero como en una historia del digno Lazarillo de Tormes, los pícaros de la esfera económica de nuestro país utilizan libremente estos urgentes mecanismos habilitados por el Gobierno de España con el fin de salvar a la población trabajadora de forma totalmente distinta a la que se concedieron, dirigiendo esta novedosa herramienta para realizar limpias de personal encubiertas y utilizar malas artes de presión para alcanzar sus objetivos marcados utilizando las maniobras habilitadas con buena fe creadas para mantener el empleo.
Por ejemplo, un caso que me he encontrado estando de vacaciones plácidamente y que me duele personalmente (porque me une a este periódico y a su gente unos preciosos recuerdos), es la situación que están pasando los trabajadores del diario La Tribuna de las diferentes ediciones de las cinco provincias de Castilla-La Mancha. Y es que el grupo Promecal, propietario de estas tiradas en la región ha declarado (yo diría más "se ha acogido a" pero eso ya como tú veas) un ERE por causas organizativas y de la producción, después de acogerse a un ERTE forzoso por COVID-19.
Por eso, dividamos el dolor de esta situación creada para comprender la importancia de este ajuste organizativo empresarial.
Por un lado, el dolor de las familias que se quedarán en la calle (yo empatizo con el sentimiento que están viviendo ya que en su momento/en su día, me vi afectado por el ERE de Teletech España) y por otro, de misma intensidad el silencio de un medio de comunicación libre.
Pero por otro lado, esto es más doloroso por lo que costó superar una dictadura y dar color a las noticias del parte diario para vislumbrar la libertad y una transparencia por la que se luchó entre otros lugares de nuestro país, en las calles y en las universidades.
Utilizo el calificativo vislumbrar porque aún no está totalmente logrado el objetivo y por desgracia, nos empeñamos en poner zancadillas destruyendo los medios de comunicación libres que se encargan de hacernos llegar la información veraz.
No permitamos el cierre de este medio pues eso provoca que la libertad de prensa y el derecho a la información, mueran poco a poco.
Javier Payo