Perder y perder oportunidades en esta región, donde por desgracia en los últimos días la situación sanitaria empeora, nos encontramos ante una sexta ola donde nos comportamos como “nuevos”, otra vez centros de salud y hospitales colapsados, teléfonos que nunca se descuelgan, y lo peor de todo, una comunidad donde el presidente regional ha decidido que ni regala un test de antígenos ni se los financia al 50% a sus vecinos, lo cual implica que la salud de la gente de esta comunidad no es prioritaria para el gobierno regional, como tampoco lo es la economía.
Estos días de diciembre hemos conocido un adelanto del Informe de la Competitividad Regional (ICREG) de 2021, elaborado por el Consejo General de Economistas, al que tengo el orgullo de pertenecer, y donde nuestra Comunidad ocupa el lugar décimo del ranking. Todas las Comunidades Autónomas gobernadas por el Partido Popular están por encima de la nuestra. Este índice permite medir el atractivo de nuestra comunidad para atraer capital, talento y mano de obra, y resulta que según este informe estamos en el grupo de nivel competitivo BAJO, siendo la variación claramente negativa en: Déficit, Variación real del PIB, Dinamismo Empresarial, Productividad y Costes Laborales Unitarios. Uno de los factores fundamentales en esa atracción de empresas y talento es el marco fiscal, y en éste nos vamos a centrar.
Los castellano-manchegos deben conocer que nuestro presidente Paco Núñez ha pedido hasta la saciedad al Gobierno regional la bajada de impuestos para nuestra región, pero además hemos presentado más de 700 enmiendas a los Presupuestos regionales. Hay que ser conscientes de que nos vamos quedando los últimos de la fila, nuestra comunidad se queda atrás respecto al resto, no despega económicamente, el empleo de calidad y duradero no aumenta, los ERTES continúan -sobre todo en hostelería y turismo, sectores clave en nuestra región, donde además contamos con dos ciudades Patrimonio de la Humanidad- y aun así nos quieren hacer creer que ya hemos retomado las condiciones económicas y de recaudación de tiempos de prepandemia.
Hace unos días, la vecina comunidad de Madrid aprobaba sus presupuestos a propuesta de la presidenta Díaz Ayuso. Oír y ver que salen adelante unos presupuestos que velan por el bienestar de los ciudadanos de su región nos debería dar envidia sana a quienes residimos en Castilla-La Mancha, y vemos como nosotros, a pocos kilómetros de Madrid, desde enero de 2022 dispondremos de menos dinero en nuestros monederos, porque tendremos que destinar más a pagar impuestos, cotizaciones sociales, a pagar más luz, más IBI, más todo.
Y pregunto a Page si piensa que cuando leemos el Proyecto de Ley de Medidas Tributarias y Administrativas de Castilla-La Mancha para 2022 nos creemos que bajan los impuestos para 2022. En esta Ley introducen desgravaciones en cuota de IRPF, de las que por limitaciones en Bases Imponible y Liquidable no podrán beneficiarse todos los vecinos de la región, son medidas selectivas y además alguna de ellas “copiadas” de las reiteradas propuestas que les viene haciendo Paco Núñez, a lo largo de 2021.
Hay algo que se pone de manifiesto en los últimos días del año para desgracia de Pedro Sánchez y que también debe resultar molesto a los oídos de Page, y es que en las cinco Comunidades Autónomas gobernadas por el Partido Popular aumenta la recaudación gracias a las bajadas reiteradas de impuestos. A la vez, estas comunidades son las culpables de la bajada del paro del que tanto presume el Gobierno central; sí, estas Comunidades, no la nuestra.
¿Por qué en Castilla-La Mancha Emiliano García-Page no baja la tarifa autonómica del IRPF? Porque se lo pide Paco Núñez y prefiere desoir su propuesta antes que beneficiar a sus vecinos. Esta medida sería clave para beneficio de todos los contribuyentes de la región obligados a presentar la declaración de renta y sería la medida que llevaría a un incremento considerable de recaudación en nuestra región, como también sería clave la propuesta de Paco Núñez para 2022 de reducir las cargas burocráticas a los autónomos y pymes que fijen su residencia fiscal aquí.
Bajadas de impuestos significan más recaudación, nuevos contribuyentes y bajadas del paro de forma reiterada, además de mayor competitividad de nuestras empresas tanto en mercados nacionales como internacionales. Cada día son más los autónomos y pymes que buscan el traslado de sus domicilios fiscales y sociales, a las Comunidades Autónomas gobernadas por el Partido Popular en busca de ventajas fiscales que les permitan abaratar costes. Como ejemplo, Madrid, que ha sido capaz de captar el 70% de la inversión extranjera que llega a España.
Alguien debería pedir a los reyes algún regalo para sus vecinos que tan duros momentos han pasado desde marzo de 2020. Desde el Partido Popular de Castilla-La Mancha, además de salud, pedimos a quienes nos gobiernan en sus últimos meses ya la tan ansiada bajada de impuestos que las familias, autónomos y pymes de Castilla La Mancha están esperando, nunca será tarde.
Pilar Alía. Coordinadora de desarrollo económico, empleo, autónomos y empresas del PP-CLM