La Pregunta LA PREGUNTA

¿Qué genial castellano-manchega ha tocado el cielo con su último y espectacular proyecto?

2 junio, 2017 00:00

La fotógrafa castellano-manchega Cristina García Rodero (Puertollano, Ciudad Real) participa en PHotoEspaña con la muestra 'Lalibela: Cerca del cielo' en el Fernán Gómez Centro Cultural de la Villa, una recopilación de "imágenes bíblicas" de sus viajes a la ciudad etíope conocida como la 'nueva Jerusalén' y situada a 2.600 metros de altitud y que puede verse desde el 1 de junio hasta el próximo 31 de julio.

"Siempre me pregunto cómo me puedo mover entre masas de gente y al final termino fotografiando individualidades. Creo que es porque las masas no me dicen nada y siempre intento entender a las personas: en este caso, me preguntaba por la fe de la gente de Lalibela y por qué yo no la tengo", ha explicado la artista durante la presentación.

La historia de Lalibela surge con el reinado a finales del siglo XII de Gebra Maskal, quien se empeño en construir una réplica exacta de Jerusalén ante la conquista de la Tierra Santa por los musulmanes. Para ello, mandó poner en pie once iglesias medievales -seis de ellas excavadas en la roca-, que se convirtieron en centro de peregrinación.

Este proyecto surge de varios viajes de la fotógrafa entre los años 2000 y 2009, que se engloban dentro de la serie 'Entre el cielo y la tierra'. "A Lalibela llegué buscando la espiritualidad y lo primero que me encontré fue unas montañas muy altas, de ahí lo de cerca del cielo", ha señalado.

Blanco y negro

La cámara de Rodero se fija tanto en los rostros de los ciudadanos durante su día a día como en personalidades de la ciudad, en especial las religiosas. También hay lugar para los ritos y las celebraciones, todas ellas, como es habitual en la obra de la fotógrafa, en blanco y negro.

Cuando la artista manchega llegó a Lalibela se "enamoró" de este territorio, aunque su viaje fue en Semana Santa "cuando todavía no es el periodo importante de celebraciones". "Tanta espiritualidad te conmueve: ante la dureza de la vida y la falta de esperanza con todo lo que han sufrido, la gente se refugia en ese contacto con Dios", ha apuntado.

Lalibela es un sitio donde "hasta hace poco no se podía entrar o era muy complicado", con cerca de 1.000 habitantes e invadida por la pobreza "debido a las hambrunas, las Guerras Civiles y las malas gestiones de Gobiernos comunistas".

La impresión que se llevó la fotógrafa fue la de una ciudad "movida por la fe y con un cristianismo muy puro, aún con muchas partes del judaísmo". Así, Lalibela se ha convertido con el paso del tiempo en el lugar cristiano de peregrinación más importante de Etiopía, capaz de convivir en paz con varias religiones cercanas.

Otro tiempo

"Estas imágenes nos llevan a otro tiempo, está como detenido. Las imágenes son casi bíblicas, como sacadas del Nuevo Testamento y uno tiene la sensación de que Cristina ha vuelto a ser capaz de ver lo que otros no ven", ha explicado la comisaria de la exposición, Oliva María Rubio.