Un millón de pasos en un mes sin salir de casa. No sabemos si la hazaña será digna de ingreso en el libro de los récords, pero sí, al menos, de una felicitación pública.
Al conocido empresario de Castilla-La Mancha, Eusebio Ramírez, propietario del Grupo Tecnove, de Herencia (Ciudad Real) su familia le improvisó ayer una emotiva línea de meta. Era una cinta verde sostenida por dos sillas colocadas a una distancia de dos metros, justo en el medio del patio. Al cruzarla,
Eusebio alzó los brazos y se dejó caer sobre el césped. La meta era el final de la jornada después de un mes (del 24 de marzo al 24 de abril) de confinamiento con un horario marcial entregado a caminatas diarias de varias horas con la misma fruición de un hámster dentro de su jaula.
Eusebio daba el paso un millón, después de su habitual recorrido diario sobre una superficie cerrada de unos 130 metros, la del de patio-jardín de casa, con rampa de acceso al garaje incluida.
Su hija se permitió grabar una secuencia en vídeo, en clave de humor, de su última vuelta hasta llegar a la meta. El menguado césped del perímetro ha quedado pelado como si hubiera pasado el caballo de Atila.
El empresario ha perdido 12,5 kilos a base de la rutina diaria que representa no sólo un ejercicio físico, sino una gran fortaleza mental.
A quienes conocen al empresario, su millón de pasos les ha parecido una pericia menor al tratarse de alguien que dejó su infancia en el campo para construir un emporio industrial con 30 años de éxito que se ha hecho a sí mismo y presente en 61 países, desde los países árabes hasta la Antártida.