La práctica de construir viviendas para destinarlas al alquiler, lo que se conoce como build to rent en la jerga del sector inmobiliario, coge fuerza en España ante una población joven con dificultades para adquirir una casa en propiedad y un perfil con mayor poder adquisitivo que se va apuntando poco a poco a esta tipología de tenencia.

Según el estudio de Urban Data Analytics (uDA), las mayores rentabilidades del alquiler en régimen de build to rent, se encuentran actualmente en la provincia de Lleida, con un rendimiento del 9,4%. A continuación de la provincia catalana se sitúa Toledo, con una rentabilidad del 8,2%. Otras zonas con rentabilidades superiores a la media nacional, en torno al 6,8%, y con fuertes crecimientos anuales son Guadalajara (7,2%), Ciudad Real (7,4%) o Soria (7,3%). Este indicador hace mención a las ganancias que supone tener un inmueble arrendado sin tener en cuenta gastos de mantenimiento y gestión, así como la rotación y los meses vacíos por falta de demanda.

Sin embargo, la empresa especializada en Big Data inmobiliario indica que generalmente la rentabilidad “está muy ligada a los indicadores de riesgo, capacidad económica de la demanda y liquidez de la zona”. Así, mercados con altos rendimientos como la provincia catalana “comprenden un riesgo elevado de inversión”, mientras que otros como Toledo, con la segunda mayor rentabilidad de España a cierre de 2021 (8,2%), “presentan un riesgo medio”.