La situación de Paco Núñez tras las elecciones del 28 de mayo es la contraria a la de su rival, el socialista Emiliano García-Page. Si el reelegido presidente de Castilla-La Mancha ha conseguido una victoria épica en su territorio en medio del hundimiento general del PSOE, el caso de Núñez es justamente al revés: ha cosechado una dolorosa derrota en Castilla-La Mancha dentro de un contexto de victoria general del PP, tanto en España como en la mayoría de las principales Alcaldías de la comunidad autónoma. Page es la isla de la felicidad en un PSOE camino del naufragio, mientras Núñez es el perdedor en una noche de ganadores en el PP.
Esta derrota de Núñez frente a García-Page, segunda consecutiva que encaja tras la producida en 2019, tiene trazas de ser la última que se anota en su cuenta personal, aunque en política nunca se puede decir "nunca jamás". Que haya una tercera oportunidad para Paco Núñez de ser presidente de Castilla-La Mancha no entra en estos momentos dentro de lo probable y por eso se ha empezado ya a comentar el futuro del líder del PP regional y las posibilidades que puedan abrirse a partir de ahora para él. Todo en fase muy especulativa, obviamente.
Salvo sorpresa inesperada, la dirección nacional del PP no abordará cambios en ningún territorio antes de las elecciones generales anticipadas del 23 de julio. A partir de ahí, y en función de lo que pase en esa jornada electoral, el futuro queda abierto y los pasos de Paco Núñez son inciertos ahora mismo. De momento, el líder de los populares castellano-manchegos empezará la legislatura como jefe de la oposición a Page en el Parlamento autonómico, aunque no es en absoluto descartable que su liderazgo tenga que ser renovado en algún momento a lo largo de estos años. Este mismo lunes ya se comentaba en círculos políticos la posibilidad de que la dirección nacional del PP de la calle Génova, pasadas las generales, empiece a pensar en un relevo tranquilo en Castilla-La Mancha y que Núñez, en su caso, pueda asumir otras tareas dentro del partido.
Obviamente, es muy pronto para hablar de hipótesis de trabajo que están completamente abiertas, pero parece próximo a la realidad pensar que, ahora mismo, la tercera oportunidad para Paco Núñez de vencer al PSOE en Castilla-La Mancha se aleja progresivamente. En todo caso, lo que ocurra en las generales de julio marcará de forma decisiva todo lo que vaya a suceder después.