Tras la DANA de septiembre de 2023 que arrasó el polígono industrial por el desbordamiento del arroyo Ramabujas y afectó de forma seria a otros barrios de la ciudad, el Ayuntamiento de Toledo habilitó una línea de ayudas, dotada presupuestariamente con 150.000 euros, dirigida a titulares de establecimientos mercantiles, industriales o de servicios afectados por la riada.
Transcurrido el plazo para presentar la solicitud y estudiada la documentación aportada, la Junta de Gobierno Local de esta semana ha resuelto de forma provisional la convocatoria. Aunque se presentaron siete solicitudes, solo dos empresas han cumplido con los requisitos. A cada una de ellas, les ha correspondido una ayuda de 1.000 euros. Una tercera ha sido excluida inicialmente, aunque aún está a tiempo de presentar alegaciones.
La Federación Empresarial Toledana (Fedeto) ya advirtió en su día que la convocatoria, al estar dirigida a empresarios individuales con hasta 10 trabajadores y que fueran propietarios del local afectado, dejaba fuera al 99% de las empresas afectadas, la mayoría sociedades mercantiles. “Cuántas personas físicas tienen una nave en el polígono”, se preguntaba en aquel momento Manuel Madruga, secretario general de la patronal toledana.
Eso sí, esta línea de apoyo era compatible con otro tipo de indemnizaciones. “Hay que entender que son ayudas sociales que no pretenden compensar económicamente, sino ayudar al empresario”, explicaba hace unos meses Juan María Marín, concejal de Promoción Económica y Empleo a El Español-El Digital de Castilla-La Mancha.