Podemos se fractura en Castilla-La Mancha con cuatro nuevas dimisiones
Podemos Castilla-La Mancha celebrará el próximo domingo en Toledo su Asamblea Ciudadana, en la que se renovará la dirección del partido, en un ambiente muy enrarecido. Las diferentes facciones del partido están sumidas en una intensa batalla interna y las críticas al actual secretario general y candidato a la reelección, José García Molina, no son pocas. Sus adversarios en el proceso y los respectivos equipos de trabajo que les acompañan, David Llorente y Fernando Barredo, le acusan de falta de transparencia y de utilizar al "aparato" para manejar las primarias a su favor.
Este clima de evidente tensión ha quedado reflejado en la dimisión de cuatro miembros del Consejo Ciudadano Regional de Podemos, lo que vendría a ser el "parlamento" de la formación morada en Castilla-La Mancha. Las dimisiones se produjeron el pasado 1 de mayo y se suman a otras dos producidas a finales del año pasado.
Los dimisionarios, que se han explicado a través de un comunicado enviado a los medios de comunicación (puede leerse íntegro pinchando aquí), aseguran que su decisión les niega "el derecho al sufragio pasivo (presentarnos en listas) en el proceso electoral interno que acaba de iniciarse". "No obstante, nos proporciona la ocasión para salir a la opinión pública a presentar nuestro balance y nuestra visión respecto de los principales retos que afronta el partido en la región, así como algunas modestas propuestas en relación con los mismos", añaden. Entre ellas, que las "decisiones políticamente estratégicas" dejen de poder tomarse "a espaldas del parlamento autonómico del partido". "A tales efectos", aseguran los firmantes, "no basta con limitar la concentración de cargos, también hay que limitar la concentración de funciones".
En una crítica que parece especialmente dirigida a la acumulación de cargos María Díaz, la número dos del partido y mano derecha del secretario general de Podemos, José García Molina, señalan que "una misma persona no puede hacerse cargo de la coordinación del Grupo Parlamentario, las labores de seguimiento de la agenda de la Secretaría General, la dirección de la Secretaria de Organización, la supervisión de las funciones de participación, la gestión y moderación de las reuniones de la ejecutiva y de las reuniones del Consejo Ciudadano Regional, la participación activa y regular en los trabajos del directorio, la coordinación de las labores de seguimiento de los acuerdos políticos con el PSOE, etc.".
Los dimisionarios, por otra parte, proponen que, a partir de este momento, cosa que entienden que hasta ahora no ha ocurrido, "las informaciones políticamente relevantes y, en consecuencia, la subsiguiente toma de decisiones" no se quede en "círculos restringidos" de la cúpula de Podemos en Castilla-La Mancha, sino que, a su juicio, "esas informaciones deberían distribuirse poco a poco, en lo sucesivo, a lo largo y ancho de toda la organización: empezando por el Grupo Parlamentario y el Consejo Ciudadano y acabando en los Círculos".
Escasa rendición de cuentas
Además, critican al Grupo Parlamentario Podemos, cuyo presidente es el líder de la formación, José García Molina, su escasa rendición de cuentas "al conjunto de la militancia activa". "No basta con tirar de tweets, eslóganes, argumentarios, visitas relámpago, infografías o vídeos en torno a hechos consumados: son las líneas de actuación a medio plazo las que deberían redactarse, negro sobre blanco, argumentándose y justificándose, con objeto de hacer partícipes al máximo número de militantes de su potencial discusión y revisión", indican.
Por otra parte, aseguran que "frente al proyecto de traducir los vínculos de la organización con la sociedad civil en términos culturales o didácticos (propagandísticos), en Castilla-La Mancha debemos tratar de ser altavoz e instrumento (y no pastor o mentor) de la sociedad civil".
Los dimisionarios de Podemos también echan en falta que se cuente con "militantes formados políticamente en condiciones de trabajar a pie de calle" y critican el vocabulario utilizado por el aparato del partido: "Conviene desconfiar de los cantos órficos a no-organizaciones imaginadas (horizontalidades, participaciones, asamblearismos, etc.) que no acaban nunca de bajar a lo concreto y que no se miden, en cada caso, con la realización de objetivo alguno. Pero, ojo, de cantos estamos bien surtidos en Podemos: la unidad de los principios y valores (nunca políticamente determinados y explicitados) frente a un enemigo omnipresente y ubicuo (la trama, la casta, la mafia, los de arriba) también sirve para aunar voluntades en torno a la nada. Y de la nada política únicamente surgen nuevas bandas… nunca un sujeto político colectivo (organizado)".
Los seis firmantes
Firman el comunicado María José Aguilar, ex Secretaria de Políticas Públicas de Podemos CLM; Raquel Crespo, ex Secretaria de Participación de Podemos CLM; Jorge García, ex Secretario de Programas y ex Secretario Político de Podemos CLM; José Carlos Gismero, ex Consejero del Área de Empleo de Podemos CLM; Adrián López, ex Secretario de Organización de Podemos CLM; María Romero, ex Secretaria de Movimientos Sociales y ex Secretaria de Organización de Podemos CLM.
Todos ellos aseguran que "ninguna de las consideraciones" que han planteado en un comunicado denominado 'Manifiesto Malashierbas' vienen motivadas "por ningún cálculo relativo a la conquista personal de poder orgánico en Podemos Castilla-La Mancha".
El pasado mes de junio el secretario de Organización de Podemos a nivel nacional, Pablo Echenique, días después de las elecciones generales, dirigió el siguiente mensaje de Telegram a los ochenta miembros del Consejo Ciudadano estatal de partido:
“Ya sabéis que yo soy mucho de amor y eso, pero no me resisto a añadir algo también necesario para este momento. Ante cualquier conflicto interno, desde la Secretaría de Organización se buscará en un primer momento la solución mediada, amorosa, consensuada y de sentido común. En caso de que la vía del amor y los cuidados se demuestre inútil, se actuará de manera contundente, decidida, concreta y grave contra quienes no comprendan (hablo en general; no de este órgano) que las guerras internas nos desangran, nos queman y nos hartan. Para que crezca el amor no sólo hay que regarlo sino también extirpar las malas hierbas de las violencias enquistadas. Sé que no hará falta, pero siempre es bueno tener un plan B cuando el amor no gana".