Así será la vuelta al cole para 330 alumnos castellano-manchegos con problemas de visión

Un total de 330 estudiantes ciegos o con discapacidad visual grave de Castilla-La Mancha regresan a las aulas estos días y recuerda la necesidad de que las nuevas tecnologías docentes sean accesibles para no quedar excluidos de determinadas materias.

Según ha informado hoy la ONCE en un comunicado, el 99,6 por ciento de los alumnos se integra en centros ordinarios de enseñanza, respondiendo al principio de una enseñanza inclusiva y gracias a su esfuerzo y el apoyo específico de los equipos de la ONCE y de las administraciones educativas.

La ONCE pone en marcha un sistema integral de apoyo, que contempla al alumno, los centros escolares y las familias, y cuyo objetivo es que la incorporación se realice en igualdad de condiciones.

De los 330 alumnos castellanomanchegos con ceguera y discapacidad visual grave que hay este nuevo curso 67 comienzan Educación Infantil; 79 estudian Primaria; 45 están en Secundaria; 17 en Bachillerato y otros tantos en Formación Profesional; 25 son universitarios y 80 están inscritos en otro tipo de enseñanzas.

En el caso de nuevos alumnos universitarios, además de los apoyos educativos específicos, la ONCE desarrolla también un programa de rehabilitación con el objetivo de dotar al alumno de una plena autonomía en la movilidad y orientación por los nuevos entornos.

Con los mismos libros que sus compañeros

Además, cada nuevo curso los servicios de producción bibliográfica de la ONCE trabajan para que los alumnos con ceguera dispongan, desde el primer día de clase, de los mismos libros de texto que sus compañeros transcritos al sistema braille o a otro soporte, así como toda la documentación necesaria en formato accesible.

En este sentido, la organización lanza cada año un mensaje a las administraciones y todos los implicados en el proceso curricular para que cualquier innovación tecnológica en el aula tenga siempre en cuenta la accesibilidad porque, de lo contrario, puede dejar fuera a estos estudiantes con discapacidad visual y colocar frente a ellos barreras a veces insuperables.