La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha pedido medidas de protección para las trabajadoras embarazadas del Sescam ante la epidemia de gripe en Castilla-La Mancha, "enfermedad que afecta especialmente a los colectivos de empleados del servicio regional de salud por la misma naturaleza de su trabajo, incluso aunque se tomen medidas preventivas tales como la vacunación y por supuesto las medidas generales de protección y barrera".
El sindicato recuerda que "los cambios fisiológicos que se producen en el sistema inmunitario, así como en el corazón y en los pulmones de las embarazadas, hacen que las mujeres embarazadas sean más propensas a desarrollar una enfermedad grave a causa de la gripe". "Además de tener mayor probabilidad de desarrollar problemas con su bebé durante la gestación, la gripe puede complicar asimismo el trabajo de parto y producir un alumbramiento prematuro. A pesar de que la incidencia de la epidemia ha bajado de alta a media en la presente semana en la región, continúa produciendo inseguridad", añade.
Es por ello que desde el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales del Sescam se recomienda no exponer a estas trabajadoras a la gripe: si no es posible el cambio de puesto de trabajo y en ausencia de destino es necesario tramitar la baja por riesgo. CSIF ha manifestado reiteradamente que "no se puede realizar una adaptación de puesto de trabajo de una trabajadora embarazada en un servicio de Urgencias, ni de centro hospitalario, ni de Atención Primaria, ni en la GUETS".