"La falta de personal, las no sustituciones en casos de bajas médicas o ausencias, el incremento de usuarios, la mala organización y la penosa gestión de algunos centros está siendo la tónica general de este último periodo". Así comienza una nota de prensa en la que el sindicato UGT denuncia la situación de las residencias de ancianos gestionadas por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Por si fuera poco, UGT alerta de que "ahora parece que (la situación de las residencias) se complicará aún mas, en el momento en el que se materialice la nueva medida estrella que se está planteando la Consejería de Bienestar Social, desoyendo el criterio técnico-asistencial de asociaciones de profesionales, colegios y publicaciones científicas y obligando al personal Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería a realizar tareas propias de categorías superiores como lo relativo al cuidado del paciente ostomizado, solo con el objetivo de no llevar a cabo la contratación del personal necesario y continuar abaratando costes".
Esta decisión de la Junta, según el sindicato, está "poniendo nuevamente en riesgo la calidad del servicio y, en definitiva, a los usuarios y usuarias de este". "Este tipo de medidas no hacen más que consagrar la mala gestión que desde la Consejería y sus mandos intermedios se viene llevando a cabo en las Residencias de Mayores de la Junta", añade UGT, que recalca que "no se puede permitir que en pleno 2019 prime la política económica sobre el servicio y el cuidado a nuestros mayores en Castilla-La Mancha".
Desde UGT, por último, confían "en que la Consejería de Bienestar Social recapacite porque, de lo contrario, tendrá que asumir su responsabilidad en el ámbito judicial correspondiente por exponer tanto a usuarios como a profesionales".