La Audiencia Provincia de Ciudad Real ha acogido la primera de las jornadas previstas del juicio con jurado en donde se juzga a un hombre, M.J.Y.H., de 60 años, acusado de matar a su pareja y a la hija de ésta en febrero de 2017 en la localidad de Daimiel.
El juicio ha comenzado a última hora de la mañana de este lunes con la constitución del jurado popular, que será el que tenga que decir sobre la culpabilidad o no del acusado de acabar con la vida de su mujer, A.B.L.S., y la hija biológica de ésta, A.M.P.L. a cuchilladas, y para el que la fiscalía y las acusaciones particulares han pedido en sus alegatos iniciales que sea condenado a la pena de 48 años y seis meses de prisión.
Tanto la fiscalía como los abogados de la acusación consideran que los hechos juzgados son constitutivos de un delito de asesinato con alevosía y ensañamiento y la circunstancia agravante de parentesco.
Por el contrario, la defensa ha pedido la libre absolución de su cliente al considerar que en el momento de los hechos sufría de trastornos mentales al haber dejado de medicarse, por ello, ha pedido que su cliente sea indultado.
Según el escrito de conclusiones provisionales presentado por la fiscalía antes del inicio del juicio, se considera que el acusado, sobre las 9 horas de la mañana del día 13 de febrero de 2017, se dirigió a la cocina, cogió un cuchillo de grandes dimensiones -34 centímetros de longitud y 20 centímetros de hoja- y, aprovechando que su hijastra se encontraba en el baño principal de la vivienda, de manera súbita y repentina se abalanzó sobre ella y, con ánimo de acabar con su vida, comenzó a asestarle hasta quince puñaladas en distintas partes del cuerpo.
Tras matar a la hija de su esposa, también la apuñaló a ella, que en un momento intentó huir y pedir ayuda a varias vecinas del bloque de viviendas en la que vivían, aunque finalmente acabó también muerta en el rellano de la escalera de la primera planta con numerosas puñaladas en su cuerpo.
Durante la jornada de este lunes estaba previsto que se escuchara la declaración del acusado, sin embargo, la jornada ha acabado tras los alegatos de la fiscalía, la acusaciones particulares y la defensa.
Está previsto que en la vista declare el acusado y a continuación tengan lugar la declaración de varios testigos, entre ellas las vecinas del bloque de viviendas donde se produjeron los hechos.
Posteriormente se presentarán las pruebas testificales, que llevarán ante la sala a agentes de la guardia civil, policías locales, médicos forenses y peritos del servicio criminalística de la Guardia Civil.