El presidente del PP de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha afirmado este lunes que el PP "ha defendido permanentemente" el agua para Castilla-la Mancha y ha "garantizado" las reservas de cabecera, y se ha comprometido a fijar una posición global "que blinde los intereses de Castilla-La Mancha" si llega a la Presidencia de la región.
En declaraciones a los periodistas durante su visita al tradicional mercadillo de la ciudad en el Parque de la Vega, acompañado por la candidata del PP a la Alcaldía de Toledo, Claudia Alonso, Núñez se ha referido a la sentencia del Tribunal Supremo que anula parcialmente el Plan Hidrológico del Tajo por no fijar caudales ecológicos en Aranjuez, Toledo y Talavera de la Reina.
Ha afirmado que el PP "ha defendido permanentemente" el mente para Castilla-La Mancha y ha "garantizado por ley" las reservas de cabecera y los caudales ecológicos, y ha explicado que hay que seguir trabajando "de manera global" y evitar hablar de agua cada cuatro año cuando llegan las elecciones.
En este sentido, ha criticado que el presidente autonómico, Emiliano García-Page, "solo ha hecho ruido" durante esta legislatura, frente a lo cual ha afirmado: "quiero pasar del ruido a la realidad, de las declaraciones grandilocuentes de Page a las decisiones en las mesas de trabajo".
Así, se ha comprometido a que si preside la Junta tras las elecciones de mayo abrirá una mesa de trabajo integrada por la Federación de Municipios y Provincias, técnicos de la Junta, municipios ribereños, empresarios, agricultores, agentes sociales y "todos" los que tienen que opinar en materia de agua, que es "un elemento fundamental" para Castilla-La Mancha, ha apuntado.
En esa mesa de trabajo se fijará "la posición común que blinde los intereses de Castilla-La Mancha", y con esa posición "iremos a Madrid" para trabajar en un acuerdo nacional, ha explicado Núñez quien ha criticado que hace ya cinco meses que se reunió con García-Page en el Palacio de Fuensalida y le propuso reunirse para fijar una "posición global" como comunidad autónoma, pero "no ha querido sentarse con el PP".
Sobre la sentencia del Supremo, ha dicho que el PP la respeta aunque "no deja de ser un elemento más en la confrontación continua que hay en materia de agua" en vez de ser "un motor de desarrollo económico".
"Ahora hay una sentencia; cada mes desde que gobierna Pedro Sánchez ha habido un trasvase; hay polémicas continuas en materia de agua cuando llegan las campañas electorales, y lo que me gustaría es que en la campaña electoral de dentro de cuatro años nadie hablara de agua porque el agua hubiera dejado de ser un elemento de confrontación y fuera un elemento de desarrollo", ha manifestado.
En su opinión, lo "histórico" sería que "algún día" todos los afectados por el agua en Castilla-La Mancha se sentaran y fijaran una propuesta común "que haga que el agua deje de ser, permítame la expresión, titular de informativo".