El investigador y coordinador del Informe del Cambio Climático en Castilla-La Mancha, Jonathan Cantero, ha destacado este lunes la "asombrosa" incidencia que dicho fenómeno está teniendo en la región y que ha propiciado, por ejemplo, que a día de hoy el verano dura 21 días más que en los año 80.
Así lo ha puesto de manifiesto el también presentador del tiempo de CMMedia durante la ponencia que ha ofrecido, dentro los actos de celebración oficial del Día Meteorológico Mundial, en los han participado el subdelegado del Gobierno en Toledo, Ángel Devia, y la delegada de la Aemet en Castilla-La Mancha, Paloma Castro, y que han incluido también una exposición sobre la historia de los instrumentos de observación meteorológica.
Cantero ha recordado que, durante sus diez años como coordinador del Informe del Cambio Climático en Castilla-La Mancha, impulsado por la Viceconsejería de Medio Ambiente, ha constatado datos "asombrosos" como que el verano ha aumentado su duración en veintiún días respecto a los años 80 o que la temperatura media de algunas provincias, como Cuenca, ha subido más de dos grados.
Esto se traduce, ha abundado el meteorólogo, en que "estamos teniendo veranos mucho más cálidos y mucho más secos pero también inviernos que están siendo más cálidos que antes" y ha puesto como ejemplo que este mismo año 2019 "hemos acabado el invierno con temperaturas próximas a los 30 grados".
Por su parte, el meteorólogo toledano David López-Rey ha disertado sobre la lluvia torrencial registrada en Cebolla (Toledo) el 9 de septiembre de 2018, "un día -ha recordado- en el que se dio una situación muy propensa para que hubiera fuertes lluvias en el centro peninsular", como así fue.
Dicho esto y refiriéndose a los importantes daños que estas lluvias ocasionaron en la localidad toledana, ha significado que, "cuando se edifica, muchas veces, los planes de urbanismo no tienen en cuenta la orografía del terreno y se construye en sitios donde no se debe construir, como diques secos o arroyos".
Y esto propicia que, cuando vienen lluvias intensas, "los cauces secos recuperan el terreno que se les ha robado y surgen los problemas", ha dicho López-Rey.
La última ponencia con la que se ha celebrado el DíaMeteorológico Mundial en Toledo ha corrido a cargo del divulgador de Meteorología y consultor de la Organización Meteorológica Mundial José Miguel Viñas, que ha hablado sobre la relación entre el sol, la tierra y el viento y ha resaltado la importancia de monitorizar y seguir la actividad solar de cara al tiempo y el clima en la Tierra, para prevenir por ejemplo las tormentas solares.
En este sentido ha explicado que la actividad del sol es variable y, a veces, emite más energía de lo normal, lo que altera las partículas eléctricas y puede afectar en algunas zonas del Planeta a las telecomunicaciones, con la repercusión negativa que esto puede tener en un mundo digital, como el que tenemos actualmente.
Por otro lado, Viñas se ha referido también a su participación, el año pasado, en la campaña Antártida, donde también se están llevando a cabo medidas de la actividad solar y meteorológicas.
En declaraciones previas a los medios, antes de las ponencias, el subdelegado del Gobierno en Toledo ha señalado que, además de conmemorar el Día Meteorológico Mundial, esta jornada es muy importante "para poner en valor la gran cantidad de colaboradores que existen en esta región, alrededor de 300, que desde su ámbito personal y de forma totalmente altruista aportan datos a la Aemet.
Devia ha puesto en valor también la ponencia sobre el cambio climático, un fenómeno ha dicho que, "aunque algunos políticos no se lo toman en serio, todos somos testigos de lo que está ocurriendo con el aumento de las temperaturas, el derretimiento de los Polos o incluso los incendios recientes que no se corresponden con la época de la que son propios", ha subrayado.
Por su parte, la delegada de la Aemet en la región ha explicado que la exposición que se ha podido contemplar en el Centro Cultural San Clemente desde el pasado día 20 y que se clausura mañana es un recorrido por la historia de los instrumentos que sirven para la observación meteorológica y ofrece un panorama general de cómo funciona la meteorología: la recogida de datos, el análisis, la previsión y la comunicación oficial de los datos.
A este respecto, el jefe del Observatorio Meteorológico de Ciudad Real, Eduardo Portero, ha detallado que en esta muestra se pueden observar instrumentos que van desde la mitad del siglo XIX -que es cuando surgió la meteorología como organización- como termómetros, barógrafos o presentadores de viento como los que utilizaban en las torres de los aeropuertos, hasta el día de hoy.
En este punto ha detallado que el instrumento más moderno que se puede contemplar es el 'dataloger', un ordenador que recoge los datos de todos los sensores y los remite después a los observatorios meteorológicos para su análisis, con la ventaja de que, a diferencia de los registradores de viento, de presión y de temperatura antiguos, ofrece un dato completo de todas las variables cada minuto.