Un decreto aprobado por el Gobierno de Castilla-La Mancha, que promoverá medidas para evitar el desperdicio alimentario e irá encaminado a distribuir el alimento, impulsará además un sello de calidad adicional para aquellas entidades que se adhieran de manera voluntaria a estas medidas y contribuyan con este objetivo.
Según ha explicado el portavoz del Gobierno regional, Nacho Hernando, que ha destacado este decreto como el primero de esta índole que se aprueba en España, y que dota de instrumentos para realizar incitativas de sensibilización e información, así como los medios para reducir el desperdicio y para fomentar una cultura cívica para la redistribución del alimento.
Promueve la adhesión voluntaria de los operadores de alimentos en Castilla-La Mancha, puesto que no tiene vocación de vigilancia ni sancionadora, por lo que se prevé establecer códigos de buenas prácticas que afecten a productores y distribuidores que lo suscriban y que se reconocerá a través del sello de calidad que otorga la Consejería de Sanidad.
La adhesión a este código se formalizará con la firma de convenios con organizaciones sectoriales, con consumidores y entidades benéficas y de carácter social. Además, se elaborará un foro para la reducción de desperdicio de alimentos con un plazo máximo de dos meses desde la entrada de en vigor de este decreto.
Asimismo, contempla la puesta en marcha de distintas acciones de sensibilización e información dirigidas a la ciudadanía en general, y de manera especial al ámbito educativo, así como a los operadores de la cadena de producción, distribución y venta de alimentos, entre ellas la elaboración de guías didácticas para abordar el desperdicio alimentario en los diferentes sectores agroalimentarios, la hostelería y la restauración.