La organización Greenpeace ha obtenido este miércoles el Premio Regional de Medio Ambiente del Gobierno de Castilla-La Mancha por su defensa de las energías renovables y su oposición a la construcción de un “cementerio” nuclear en la localidad conquense de Villar de Cañas.
La entrega del premio, que este año alcanza su tercera edición, ha tenido lugar durante un acto institucional que se ha celebrado en el Gran Teatro de Manzanares (Ciudad Real), con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente, y que ha estado presidido por el presidente en funciones de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page.
Además, ha sido distinguida con mención especial la Asociación de Gestores Ambientales de Albacete (AGESAM) por el proyecto ‘Kilowatios de solidaridad’, que pretende concienciar sobre la importancia de la correcta gestión de los residuos eléctricos y electrónicos entre los más pequeños.
La Fundación Savia también ha sido premiada con una mención especial por su contribución a la conservación de los recursos naturales y defensa del mundo rural en Castilla-La Mancha, así como la Denominación de Origen Uclés, por sus iniciativas de cálculo de huella de carbono y de certificación ambiental, como ejemplo de sostenibilidad ambiental en el sector vitivinícola.
Esta misma distinción, la ha recibido la Red Alimenta por su iniciativa colaborativa de freno al desperdicio alimentario y el diario digital eldiario.es en Castilla-La Mancha por su implicación e iniciativas en Castilla-La Mancha, en sus cinco años de creación.
Compromiso regional
Durante su intervención, el consejero de Agricultura, Medioambiente y Desarrollo Rural en funciones, Francisco Martínez Arroyo, ha reafirmado el compromiso del Ejecutivo autónomo de protección del medio ambiente y la lucha contra el cambio climático, tras cuatro años en los que se ha logrado paralizar el “cementerio” nuclear en Villar de Cañas (Cuenca) y se ha aprobado una Ley Antifracking.
Además, ha dicho que en la región “no quedan depósitos de neumáticos” y ha subrayado que se está a punto de aprobar la Ley de Economía Circular que, “la primera en España, si hacemos las cosas bien y rápido”.
Martínez Arroyo ha destacado que en un día en el que la calidad del aire centra la efeméride, ese compromiso se refuerza en Castilla-La Mancha a través de políticas trasversales para mitigar los efectos del cambio climático, y ha destacado que donde se puede “presumir de contar con el lugar donde mejor aire se respira” es en Campisábalos, en Guadalajara.
Asimismo, ha resaltado la importancia de la educación, sobre todo desde edades tempranas, en la protección del medio ambiente y ha recordado que se va a enseñar a los escolares dónde acaba el agua que se utiliza en la agricultura de la región, dentro del Plan específico de Educación Ambiental al que se van a destinar cuatro millones de euros hasta 2025.
En esta tercera edición del premio regional de Medio Ambiente, instaurado por el Gobierno autónomo con el fin de reconocer públicamente a las personas, entidades e instituciones que han destacado en su labor de defensa y promoción ambiental, han participado también el alcalde de Manzanares, Julián Nieva; y el presidente de la Diputación de Ciudad Real, José Manuel Caballero.
El acto ha estado amenizado por la Orquesta de la Música del Reciclaje de Ecoembes, compuestas por niños de entre 12 y 18 años, que ha ofrecido un concierto con instrumentos de material reciclado, un proyecto para ofrecer formación musical a menores en riesgo de exclusión social, educándoles en valores y favoreciendo su superación personal.