El Gobierno de Castilla-La Mancha ha hecho público un comunicado en el que solicita que se extremen las medidas de precaución habituales para la prevención de incendios en la región. Este anuncio se produce después de que la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) haya declarado para este martes y mañana miércoles la alerta amarilla en la provincia de Guadalajara, una situación meteorológica adversa que podría originar la rápida y desfavorable propagación de los incendios.
Por ello, desde la Consejería de Desarrollo Sostenible se reclama la máxima colaboración para que, a lo largo de las labores agrícolas de cosecha que se realicen los días 23 y 24 de julio, se apliquen las recomendaciones habituales para esta actividad en materia de prevención de incendios. En este sentido, recomienda incluso que la cosecha quede suspendida en el periodo comprendido entre las 15 y las 20 horas de estas dos jornadas ante la previsión de elevadas temperaturas y vientos fuertes y racheados por la tarde en esta provincia.
El consejero de Desarrollo Sostenible, José Luis Escudero, ha valorado la “importancia” de la actividad agrícola en la región, pero ha pedido la “máxima precaución” a los agricultores castellano-manchegos durante la campaña de verano contra incendios para que “podamos preservar y disfrutar de nuestro valioso medio natural”.
Durante la reciente visita al Centro de Coordinación Operativa Regional de Incendios (COR), en Toledo, Escuderoseñaló que “esta campaña de incendios está siendo más crítica que la anterior por las altas temperaturas y, por ello, apelamos a los ciudadanos para que asuman que todos tenemos una tarea como agentes en la prevención de incendios, extremen la precaución y atiendan los mensajes de los agentes medioambientales para reducir la propagación de incendios”.
Asimismo, recalcó que cerca del 40 por ciento de los incendios se producen por negligencias y causas accidentales. Escudero agregó que “esto significa que casi el 40 por ciento de los incendios los podemos evitar, por lo que pido a los ciudadanos que extremen la precaución”. Entre las principales recomendaciones preventivas se encuentran no hacer fuego en el medio natural o utilizar maquinaria que pueda producir deflagraciones o chispas, no fumar ni arrojar colillas y evitar salir de los caminos autorizados con los vehículos cuyos tubos de escape calientes en contacto con el pasto puedan producir un incendio.
El Gobierno de Castilla-La Mancha destina alrededor de 85 millones de euros a la prevención y extinción de incendios en 2019. En la actual campaña de incendios participan en torno a 3.000 trabajadores, entre personal funcionario y laboral, y trabajadores de la empresa pública Geacam, acompañados de 25 medios aéreos.