El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y su homólogo en Aragón, Javier Lambán, han mantenido este martes un encuentro institucional en la localidad alcarreña de Molina de Aragón, donde han acercado posturas en cuestiones como el reto demográfico, financiación autonómica o colaboración en servicios básicos entre ambas autonomías. Los dos dirigentes han coincidido en la urgencia de negociar un nuevo modelo de financiación como elemento indispensable para afrontar el problema de despoblación que sufren las dos autonomías.
El presidente castellano-manchego, Emiliano García-Page, ha arrancado su turno de intervención agradeciendo tener "muchas cosas en común" con Lambán, celebrando que entre Castilla-La Mancha y Aragón "no haya muros" y "funcionen las cosas con razonable normalidad". En materia de financiación, ha avisado de que a Castilla-La Mancha "no le va a valer una propina, ni un fondito", tras lo que ha recordado que en una localidad como Molina de Aragón cuesta mucho más atender un infarto que en Sabadell.
Aunque ha reconocido haber "avanzado mucho" en pocos años en materia de despoblación, ha recalcado que "no toda la despoblación es la misma", ya que en el caso de su región no es similar el problema de zonas de montaña o en La Mancha. "Hay muchas formas y muchos matices de abordar este problema. No lo queremos ver como un drama. Reclamamos que uno de los elementos absolutamente imprescindibles para nosotros es que en el modelo de financiación a negociar" sea clave tener en cuenta las "singularidades" de la despoblación. En esta línea ha insistido en que es la "igualdad de oportunidades" la que debe primar a la hora de repartir el dinero entre las comunidades autónomas.
Para ello hay que tener en cuenta las "singularidades" de cada región, pero "el grueso de la financiación no tiene que someterse a la bilateral" entre regiones y Estado. "Nos tenemos que sentar todos --más allá de los regímenes forales-- a negociar. Y si no se ha hecho es por Cataluña", ha dicho. Son ya "muchos años de retraso" para abordar la nueva financiación autonómica, y ahora "se está poniendo en peligro el Estado del Bienestar", ha alertado García-Page.
A pesar de que las comunidades autónomas "han enderezado el rumbo", ha avisado al Ministerio de Hacienda de que si quiere que las regiones cumplan, también tienen que hacerlo en el Departamento de María Jesús Montero. "El escaqueo que nos han hecho con el IVA tiene que resolverse en semanas. Es un problema que nos puede llevar a todos a un estrangulamiento que haga resentirse los planes de expansión en servicios sociales", ha advertido.
De su lado, el líder del Ejecutivo aragonés, que ha arrancado la intervención conjunta manifestado su pesar por los efectos de la gota fría en la comunidad vecina, ha querido recordar un encuentro similar en la capital conquense en el año 2016 con García-Page donde ya se habló del problema de financiación. Así, ha enfatizado que Aragón y Castilla-La Mancha comparten problemática al respecto, toda vez que en 2019 han operado con presupuestos prorrogados, además de que hay "tensiones de tesorería" por no tener disponibles las entregas a cuenta correspondientes a este año.
"Tenemos el compromiso del Ministerio de que las tendremos, pero es difícil en esta situación de interinidad", ha dicho Lambán, quien ha reparado en que son más de 80 millones de euros los que faltan por la liquidación del IVA de 2016, algo que es un "lastre" para las cuentas aragonesas. "Esperamos resolverlo de manera pacífica y sensata, sino tendremos que recurrir a otro tipo de fórmulas". De este modo, ha urgido a contar con esas entregas a cuenta. "Necesitamos el cálculo de entregas a cuenta para 2020 y el cálculo de déficit para orientar nuestros trabajos", ha indicado.gráfico de Aragón y de Castilla-La Mancha a estar en permanente interlocución, recordando que administraciones como ayuntamientos y diputaciones son también "fundamentales" para abordar estas estrategias.