Un año más, el Gobierno de Castilla-La Mancha pondrá en marcha el Programa de Consumo de Frutas, Hortalizas y Leche y sus derivados en los centros escolares como parte de la estrategia para fomentar una educación alimentaria desde las edades más tempranas.
Con este objetivo, el Consejo de Gobierno ha dado el visto bueno a la convocatoria de ayudas para el suministro de estos productos en centros de Educación Infantil, Primaria y Educación Especial a lo largo del presente curso escolar 2019-2020 en una acción coordinada por las consejerías de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural; Sanidad; y Educación, Cultura y Deportes, según ha informado la Junta en nota de prensa.
Para ello, el Gobierno de Castilla-La Mancha dispondrá de 1.000.135 euros para el programa de reparto de frutas y hortalizas y otros 154.486 euros para el reparto de leche y productos lácteos, cantidades financiadas el Fondo Europeo Agrícola de Garantía (FEAGA) dentro del nuevo marco normativo nacional y comunitario.
De acuerdo a estas partidas presupuestarias y a los resultados del programa en el pasado curso escolar, la consejera y portavoz del Ejecutivo regional, Blanca Fernández, ha estimado que se podrá llegar a distribuir frutas y hortalizas a 105.000 alumnos y alumnas pertenecientes a 630 centros escolares, y en el caso de la distribución de leche y productos lácteos a 49.500 chicos y chicas de 123 centros.
En este sentido, Fernández ha destacado el gran esfuerzo y la colaboración del Gobierno que preside Emiliano García-Page con las familias en esa tarea conjunta de fomentar una alimentación sana que con este programa beneficiará al 36 por ciento de todo el alumnado de la región.
Entre los compromisos que deberán adquirir los centros participantes están el de destinar las frutas y hortalizas o la leche y productos lácteos para su consumo en horario distinto al del comedor, poner a disposición del proveedor autorizado un listado e intolerancias y alergias relacionados con los productos que se suministrarán, nombrar una persona del centro como coordinadora y conservar en condiciones higiénico-sanitarias adecuadas las raciones desde su recepción en el centro hasta su consumo por los escolares.
Se trata de una iniciativa que se lleva a cabo en las aulas de Castilla-La Mancha desde el curso 2009-2010 con el objetivo de incrementar el consumo de estos productos entre la población infantil y que así desarrollen unos hábitos alimentarios adecuados.
Junto a ello, el programa de reparto de frutas, hortalizas y leche en las escuelas de toda la región se complementa con una serie de actividades de sensibilización, en las que por medio de juegos y talleres se forma a los niños y niñas en hábitos de nutrición saludables.
Ayudas de comedor escolar
La portavoz ha entroncado esta medida con el compromiso de recuperación social a través de ayudas a las familias más desfavorecidas que se cifra en más de 20.000 ayudas de comedor --un 16 por ciento más que el curso pasado--, y la apertura de 16 nuevos comedores escolares que están dando servicio a un millar de alumnos y alumnas.
Dentro de este sistema de trabajo transversal entre las distintas consejerías, Fernández también ha hecho mención a la labor que está desarrollando Sanidad en el marco del Plan de Salud 2019-2025, que incluye un apartado muy concreto con una estrategia de fomento de hábitos saludables y prevención de la obesidad infantil a través de políticas y acciones durante toda la legislatura que involucra a los ámbitos sanitarios, educativo, comunitario y empresarial.
Para concluir, Blanca Fernández ha incidido en la importancia de este Programa Escolar de Consumo de Frutas, Hortalizas y Leche, ya que "desempeña un papel fundamental en la reducción de los índices de obesidad y de los riesgos de enfermedades graves en la edad adulta, haciendo buena la frase de 'prevenir es mejor que curar'".