El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha pedido al primer secretario del PSC, Miquel Iceta, que ya que le pide "respeto" con los independentistas, le gustaría también que él le defendiera ante "tanto insulto y ataque" que recibe cuando defiende la igualdad y unidad de España.
Tras mostrar su respeto por su compañero en Cataluña, García-Page ha querido salir así al paso de las últimas manifestaciones de Iceta pidiéndole a él y al también dirigente autonómico, Javier Lambán, comportarse "con respeto" aunque mantengan discrepancias políticas con la negociación con ERC.
Unas manifestaciones que ha realizado a los periodistas en Guadalajara, donde ha señalado que, seguramente, Iceta tiene en este momento toda la información que le falta a él sobre lo que está pasando pero le ha recordado que "sobre toda España hablan todos los españoles y todo el PSOE también". En esta línea, ha incidido en que le gustaría "verse defendido ante tanto insulto y ataque" que recibe tanto él como otros presidentes autonómicos.
"Yo no he llamado xenófobo a Torra, hay quien lo ha hecho y ahí no le he visto para nada protestar al compañero Iceta", ha dicho tras preguntarse en alto si es que hay que esperar a que veten a Iceta los independentistas para ir al Senado y así poder criticar a los independentistas.
"Cuando a Iceta le dicen que no puede ir al Senado y le quitan la posibilidad de ser presiente de esta cámara entonces si vale decir que España no puede depender de los independentistas. Yo digo lo mismo que dije hace tres semanas y hace tres años y probablemente lo seguiré diciendo en los próximos treinta", ha subrayado el presidente.
Además, el líder castellano-manchego ha dejado claro que él es también de los que ve "con agrado" que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, intente hablar con todos los presidentes autonómicos.
En este sentido, ha matizado que incluso cree Sánchez está más obligado a reunirse con todos los presidentes para que no dar "un trato especial" al presidente de la Generalitat de Cataluña, pero le "gustaría" también que otros presidentes dejaran "atrás posiciones de partido" y atendieran al presidente del Gobierno "desde la posición más institucional", aunque sea "para llevarle la contraria o discrepar", ha apuntado.
Le agradaría igualmente, ha dicho, que muchos españoles pudieran observar la posibilidad de que el PP en España, aunque solo fuera por corresponder a lo que hizo el PSOE en su día, "pudiera plantearse una abstención tranquilizadora", ha puntualizado.
Para García-Page, esto debería hacerse pero no por el PSOE, ni siquiera por el Gobierno, sino porque "la prioridad uno es intentar evitar un condicionante a la igualdad y a la unidad del país" que, a su juicio, es lo que está planteando los independentistas, ha concluido.