Nueve personas han fallecido por ahogamiento no intencional en espacios acuáticos durante el pasado año 2019 en Castilla-La Mancha, según el Informe Nacional de Ahogamientos (INA) que elabora la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo.
Tres de las nueve muertes han tenido lugar en la provincia de Toledo, dos en la de Albacete y en la de Guadalajara, una en la provincia de Ciudad Real y otra en la de Cuenca.
El perfil de la persona que ha fallecido por ahogamiento en Castilla-La Mancha el pasado año es el de un hombre (89 por ciento), de nacionalidad española (100 %), que murió en un espacio acuático que no era ni una playa, ni un río ni una piscina (67 %) y, en cualquier caso, sin vigilancia (100 %).
Por comunidades autónomas, la Comunidad Valenciana, con 61 muertes, ha sido el territorio español donde más vidas se han perdido por esta causa, por delante de Andalucía (58 fallecidos), Cataluña (57), Galicia (54), Canarias (49), Castilla y León (28), Islas Baleares (23), Cantabria (22), Región de Murcia (20), Asturias (15), Aragón (13) y País Vasco (12).
Con menos de diez fallecidos aparecen Castilla-La Mancha (9), Extremadura y La Rioja (6 en cada región), Comunidad de Madrid (4), Navarra (2) y la Ciudad Autónoma de Melilla (1), mientras que en Ceuta no se ha registrado ningún caso.
Por otro lado, durante el quinquenio 2015-2019, en Castilla-La Mancha han perdido la vida en estas circunstancias un total de 39 personas, lo que sitúa a la región en décimo tercer lugar de la estadística a lo largo del lustro.
Esta estadística está encabezada por Canarias con 330 fallecidos, seguida de Andalucía (319), Galicia (271), Comunidad Valenciana (251), Cataluña (229) e Islas Baleares (164).