Potenciar los modelos de cabeceras comarcales, a fin de que todos los castellano-manchegos puedan acceder a los servicios básicos en media hora, apostar por el enfoque de los grupos de acción local y su metodología de trabajo "de abajo a arriba", o crear "un festival o un día del orgullo rural", a fin de reivindicar "lo bien que se vive en los pueblos" son algunas de las sugerencias que el mundo académico aporta al combate contra la despoblación y el despoblamiento en Castilla-La Mancha.
Así lo ha indicado el profesor de Geografía Humana y director del Departamento de Geografía y Ordenación del Territorio de la UCLM, Ángel Raúl Ruiz, que este martes ha comparecido en la Comisión no Permanente de Estudio para alcanzar un Pacto contra la Despoblación en Castilla-La Mancha que, creada en julio del 2019, pretende alumbrar respuestas administrativas al reto demográfico, con especial atención a lo que sucede en el medio rural.
Ruiz, que ha iniciado su intervención diferenciando entre despoblación, que es la pérdida efectiva de habitantes, del despoblamiento, pérdida física de un enclave, ha admitido que se trata de un fenómeno "muy complejo" y de un problema demográfico, pues en él intervienen también el envejecimiento, la masculinidad rural y falta de nacimientos. De ahí, que haya reclamado que la demografía forme parte de la agenda política de "forma activa".
Ruiz, que ha indicado que las expectativas de solución han de tener en cuenta la dimensión territorial de cada lugar, ha defendido que el problema de despoblamiento en Castilla-La Mancha "no tiene solución", pues con 23 habitantes por kilómetro cuadrado siempre ha sido una región "dispersa".
"Eso no se puede paliar, pero se pueden plantear medidas con el objetivo de que cada habitante que viva en la región tiene que tener acceso a educación y sanidad en 30 minutos", ha insistido el director del Departamento de Geografía y Ordenación del Territorio de la UCLM, que ha añadido que es necesario realizar diagnósticos en profundidad para poder captar fondos de la política de cohesión de la UE y soluciones "imaginativas" en función de los recursos de cada territorio.
A pesar de admitir que no es fácil la puesta en marcha de esas cabeceras comarcales, que requieren abandonar el enfoque provincial y crear espacios urbanos que sean capaces de prestar servicios a sus áreas de influencia, ha abundado en la necesidad de trabajar en la metodología 'Leader' y de mejorar la percepción que se tiene de lo rural, proponiendo la celebración de "un día del orgullo rural o un concurso o un festival" para superar "esa imagen peyorativa del paleto de pueblo de los años '60".
De igual modo, considera preciso "reforzar el sentimiento identitario de ser castellano-manchego", poniendo como ejemplo a las Highlands escocesas, que está siendo referente de buenas prácticas en el combate de la despoblación del medio rural.
De su lado, el catedrático del Departamento de Tecnologías y Sistemas de la Información de la UCLM, Francisco Ruiz, ha asegurado que la despoblación y el despoblamiento pueden afectar a cualquier municipio de la región, no solo a los rurales, pues ha detallado que Puertollano, Talavera de la Reina y Tomelloso han llegado a perder hasta un 9 %.
Para ejemplificar las "contradicciones" ha hablado de la provincia Guadalajara: aunque ha ganado en los últimos años 96.000 habitantes esconde realidades enfrentadas, pues si la población en la zona del Corredor del Henares ha subido un 90 por ciento, el resto de la de provincia con una densidad de 3 habitantes por kilómetro cuadrado, ha perdido un 24.
Mapa de zonas de prioridad demográfica
Mientras, el catedrático de Hacienda Pública de la UCLM, Juan José Rubio, ha reclamado una estrategia nacional de lucha contra la despoblación, en la que participen todas las administraciones, incluso la europea, que conlleve el diseño competencial claro de responsabilidades y el diseño de un mapa de zonas de prioridad demográfica, con áreas de riesgo extremo, alto y medio.
Además de hablar de la necesidad de reformular las políticas de financiación y coordinación, para incorporar de forma explícita una estrategia demográfica que conlleve la obligatoriedad de rendir cuentas de la ejecución presupuestaria de cada medida, pues de lo contrario "se haría retórica de la política de despoblación", Rubio también ha sugerido reforzar las diputaciones provinciales como entidades de referencia en las políticas de sostenimiento de las entidades menores y que corrigen desequilibrios demográficos.
Así las cosas, y luego de recomendar crear incentivos económicos y desarrollar la carrera profesional para empleados públicos que fijen domicilio en zonas rurales, ha aconsejado impulsar servicios oficiales de proximidad a modo de 'ventanilla única' en zonas rurales y habilitar ayudas a las entidades locales para que articulen planes de acogida para población inmigrante extranjera, pues hoy en día "muchos pequeños municipios viven gracias a estas personas".
Reducir la carga burocrática para desarrollar proyectos públicos privados que contribuyen a la reactivación económica del medio rural, una fiscalidad favorecedora para los municipios de menos de 5.000 habitantes y establecer a nivel normativo una carta de servicios públicos garantizados son otras de las recetas que este catedrático de la UCLM ha sugerido en la Comisión.
"No puede haber ciudadanos de primera, en las zonas urbanas, y de segunda, en las rurales. Establecer planes provinciales de desarrollo de servicios públicos exige un marco presupuestario y un incremento programado", ha defendido Rubio.
También ha hablado de establecer servicios de atención infantil en los pueblos, parecidos a los que ya perciben los ancianos, de articular ayudas a la natalidad y de impulsar planes municipales de regeneración urbanística para pequeños municipios, sin desdeñar la posibilidad de las segundas residencias en zonas rurales. De igual modo, para favorecer el desarrollo de ocio y cultura en las zonas rurales, ha concluido planteando crear centros de ocio y comerciales comarcales.
En esta primera jornada de comparecencias también ha participado el comisionado para el Reto Demográfico, Jesús Alique, que a pesar de destacar que en lo que va de siglo --de 2001 a 2019-- la población en Castilla-La Mancha ha crecido un 15,8 %, lo que se traduce en 277.810 habitantes más, ha precisado que los municipios de menos de 2.000 habitantes, donde vive el 15 % de la población regional, suponen un 80 por ciento en la configuración de la misma.
En su intervención ha recordado que el Pacto contra la Despoblación, que el Gobierno regional firmará "en breve" con agentes sociales, FEMP y grupos de Acción Local", derivará en una Estrategia contra el Despoblamiento y en la Ley de Desarrollo Rural Territorial y Contra el Despoblamiento, en fase de desarrollo. Se ha mostrado confiado en que esta nueva norma esté "operativa" en el 2021.
Después de afirmar que el Ejecutivo estará atento a lo que salga de esta comisión de estudio parlamentaria a fin de hacerse eco, "en la medida de lo posible", de las recomendaciones que afloren, ha reparado en que al despoblamiento se le suman la dispersión territorial y el envejecimiento, factores que el Ejecutivo central ha de tener en cuenta a la hora de abordar un nuevo modelo de financiación autonómica, pues la clave está en el coste de los servicios que se prestan en los lugares poco habitados de la región.
La próxima comisión se celebrará el próximo martes, día 18, con la comparecencia de Recamder, Red de Áreas despobladas, Cecam y el profesor de la Universidad de Alcalá José Carlos Diez.