Podemos ha anunciado este viernes que aplaza por la crisis del coronavirus su tercera asamblea ciudadana estatal que reelegirá a Pablo Iglesias como secretario general por otros cuatro años, con lo que se cancelan las votaciones para elegir a la dirección, que comenzaban este sábado.



La Secretaría de Organización del partido ha anunciado este viernes su decisión de aplazar todo el proceso, que hasta hoy seguía vigente de forma telemática, pese a que ya se anunció la cancelación del acto presencial que iba a tener lugar el día 21 de marzo en Leganés.



"La prioridad absoluta en estos momentos es frenar la expansión del coronavirus y contribuir con ello a salvar vidas y cuidar la salud de la población, todo lo demás pasa a segundo plano", dice el partido del vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, que se encuentra en situación de cuarentena después de que su pareja, Irene Montero, diese positivo por la enfermedad.



El anuncio por parte del Gobierno de la declaración del estado de alarma ha llevado a Podemos a aplazar este proceso "sine die" "a la espera de la evolución de los acontecimientos".



"Además de sumarnos a las indicaciones de las autoridades en todo lo referente a la movilidad, hábitos, etcétera, queremos enviar un mensaje de apoyo y afecto a nuestra militancia y transmitirles que, en cuanto las circunstancias lo permitan, reanudaremos en las mismas condiciones la Asamblea Ciudadana -desde este momento del proceso hasta la proclamación de las candidaturas ganadoras-, anunciándolo con la debida antelación", dice el partido.



La formación explica que serán válidas las votaciones que ya habían comenzado -las de los documentos y representantes de los círculos- y se reanudarán más adelante, cuando se retome la asamblea, el equivalente en Podemos a los congresos de los partidos, en el que los inscritos están llamados a elegir el rumbo y la dirección por otros cuatro años.



De esta tercera asamblea saldrá reelegido con toda seguridad como secretario general Pablo Iglesias por otros cuatro años, ya que solo se presenta contra él un militante prácticamente desconocido, el castellanomanchego Fernando Barredo.