El nuevo coronavirus COVID-19 sigue poniendo a prueba al sistema sanitario español y castellano-manchego. Los contagios detectados siguen subiendo pero, según los datos oficiales ofrecidos este martes por el Ministerio de Sanidad, lo hacen a un menor ritmo que en jornadas anteriores. En Castilla-La Mancha la cifra de infectados asciende a 6.424, que son 566 más que el lunes. Esto supone un incremento del 9,66 %, más bajo que el registrado del sábado al domingo (16,27 % -734 casos más-) y del domingo al lunes (11,67 % -612 casos más-).

Lo que no cesa es el drama diario en cuanto al número de fallecidos. Un total de 708 castellano-manchegos ya han perdido la vida por esta pandemia tras registrarse 86 nuevas muertes en las últimas 24 horas. Este es el segundo peor dato registrado en Castilla-La Mancha desde el comienzo de esta crisis sanitaria, solo superado por la trágica jornada del sábado, cuando fallecieron 91 personas.

Eso sí, el incremento porcentual de fallecidos lleva cuatro jornadas consecutivas reduciéndose. En concreto, ha pasado del 22,07 % registrado el pasado día 28 de marzo al 13,83 % de hoy.

El consejero de Sanidad de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández Sanz, ha asegurado en una rueda de prensa ofrecida este martes desde el Palacio de Fuensalida de Toledo que "parece que hemos terminado la semana más difícil" y, aunque no ha querido "pecar de triunfalismo", ha afirmado que "los datos aventuran una mejoría" de la situación. Así, ha explicado que sigue reduciéndose la tasa de pacientes que acuden a las Urgencias de los hospitales de la región con síntomas de COVID-19 y precisan ingreso. Hasta el pasado fin de semana la tasa de hospitalización estaba entre el 55 y el 60 por ciento de los pacientes y, desde el domingo, dicho porcentaje se ha reducido hasta el 39 por ciento.

Además, pese a que el número de ingresados en UCI ha subido de 302 a 344 del lunes al martes, el sistema sanitario castellano-manchego sigue teniendo 21 camas disponibles para atender a los pacientes críticos que requieran ventilación mecánica, aunque en las próximas horas llegaran cedidos 6 respiradores más cedidos por el Ministerio de Sanidad.

La Junta no prevé acondicionar nuevos espacios

También hay casi 700 camas libres de hospitalización convencional, aunque no se han ofrecido datos concretos por hospitales. Y es que la estrategia del Gobierno de Castilla-La Mancha esseguir trabajando en red. En ese sentido, el consejero ha señalado que ha habido "muchas" derivaciones de pacientes (también de críticos) entre los centros hospitalarios castellano-manchegos. Así,Fernández Sanz ha asegurado que la previsión es no tener que acondicionar espacios no sanitarios para atender a los pacientes de la región, ya que"abrir centros fuera solo nos traería más problemas, porque no tenemos más personal, habiendo contratado ya a más de 2.300 sanitarios" para dar respuesta a esta pandemia "con todo lo que podemos".

"La capacidad asistencial la seguimos manteniendo intramuros, dentro de nuestros hospitales". Además, debido al descenso en el incremento de positivos y de hospitalizaciones, el máximo responsable de la sanidad castellano-manchega piensa que "vamos a poder seguir dando respuesta dentro de nuestros hospitales al virus". Pese a ello, Fernández Sanz ha asegurado que no quiere analizar la situación con optimismo o de manera alejada a la realidad, debido a que "los hospitales están en una situación difícil y comprometida" y enfrentándonos a "situaciones de mucha presión asistencial". "Estamos dando el 500 por cien. Tenemos mil camas más que en un mes de marzo normal, tenemos el triple de pacientes que necesitan respiradores que en una situación normal", ha añadido el consejero, que ha insistido en que "estamos en una situación extraordinaria, extrema".

En cuanto a los pacientes dados de alta, ya son 296 en Castilla-La Mancha, sumando 44 más en la última jornada. Eso sí, la región castellano-manchega sigue teniendo la peor ratio de España, de una manera tristemente destacada, la peor ratio nacional entre pacientes fallecidos y dados de alta. Hasta el momento, por cada curado se registra una tasa de 2,4 muertes.

El COVID-19, según los recuentos oficiales, que pueden diferir mucho de los datos reales debido a que a muchos pacientes con síntomas no se les hace el test de detección de la enfermedad por falta de material, afecta a casi 2,9 castellano-manchegos de cada mil, siendo la nuestra la cuarta región española con mayor incidencia, solo por detrás de La Rioja, Madrid y Navarra.

Datos por provincias

Por provincias, Ciudad Real tiene 2.297 casos positivos por el nuevo coronavirus, Albacete 1.707 casos, Toledo 1.484, Guadalajara 643 y Cuenca 293.

En cuanto a los 708 fallecimientos, se reparten geográficamente de la siguiente manera:Ciudad Real acumula 218 defunciones, Toledo 181, Albacete 148, Guadalajara 97 y Cuenca 64.

Las personas que permanecen hospitalizadas ascienden a 3.225, que se encuentran distribuidas de la siguiente manera: 576 en el Hospital de Albacete, 60 en el Hospital de Almansa, 71 en el Hospital de Hellín, 101 en el Hospital de Villarrobledo, 372 en el Hospital de Ciudad Real, 383 en el Hospital Mancha Centro de Alcázar de San Juan, 65 en el Hospital de Manzanares, 112 en el Hospital de Puertollano, 142 en el Hospital de Tomelloso, 73 en el Hospital de Valdepeñas, 189 en el Hospital de Cuenca, 312 en el Hospital de Guadalajara, 597 en los hospitales de Toledo y 145 en el Hospital de Talavera de la Reina.