El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha anunciado que su Consejo de Gobierno va a aprobar el próximo martes la compra de un total de 22 millones de mascarillas para afrontar lo que ha denominado como la "fase de convivencia" con el COVID-19.
En una rueda de prensa ofrecida este domingo tras la reunión mantenida con otros presidentes autonómicos y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha reparado en que esta crisis "no se va a acabar mañana", razón por la cual hay que empezar a tomar "decisiones". Toda vez que "no se puede estar en casa sin producir", algo que entiende que "no es saludable", ha apostado por "equilibrar poco a poco el confinamiento".
Estas mascarillas "de tipo quirúrgico" llegarán directamente "a los domicilios de la gente, o a través de la enorme red de consultorios locales y de centros de salud, y también en colaboración los con los ayuntamientos", ha avanzado García-Page.
Sin embargo, el presidente regional ha señalado que, con esta decisión del Gobierno que preside, "no se trata de suplir la compra que pueda hacer cada uno". Así, ha enfatizado que todo "esfuerzo" de cara a la compra de mascarillas que pueda realizar cada ciudadano, "no es solo necesario sino que es obligado" puesto que "lo prioritario es que no falten (las mascarillas) a los sanitarios, a las residencias, a la policía...".
El Gobierno regional no tendrá vacaciones
Además, Page ha adelantado que "este año nuestro Gobierno no se va a tomar vacaciones". "Me gustaría incluso que las Cortes regionales tuvieran actividad plena en los meses de verano. Hay que tomar decisiones para la reconstrucción y no hay tiempo que perder", ha añadido.
El presidente también ha querido señalar que "es muy importanteque la gente sepa que quienes están soportando el gasto sanitario son las comunidades. Esto no puede ir a las costillas ni a las espaldas de las generaciones futuras.Quiero que la operación salida de la crisis, tanto sanitaria como social, la hagamos de la manera más consensuada posible".