El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha sido muy crítico este sábado con la labor política que el Partido Popular está ejerciendo desde la oposición desde el comienzo de la crisis sanitaria, tachando su forma de actuar como "un comportamiento que evidentemente tiene poco que ver con la educación política que reclaman los ciudadanos". "Se han quedado a un milímetro de llamarnos asesinos", ha aseverado en alusión al escrito con el que el PP solicitó una comisión de investigación en el Parlamento para analizar la gestión de la pandemia por parte del Gobierno autonómico.
Durante su intervención en el pleno extraordinario celebrado en las Cortes regionales, García-Page ha reparado en que el PP ha "acusado al Gobierno de las muertes" en esa petición de comisión de investigación, lo que le provoca "una incomprensión política" de la forma de actuar de los 'populares'."Ni se han esperado a que pase la pandemia para pedir mi dimisión. Me la pidieron cuando había un fallecido en la región y 50 contagiados. Debo de ser un diablo, desde luego", ha dicho.
En su opinión, la ciudadanía hubiera entendido mejor que primero "se ataque al virus" y después "se intente sacar tajada política" de la crisis sanitaria."Cuando estábamos con más sufrimiento estaban pidiendo una comisión de investigación, pero no para investigar al virus, sino para investigar al Gobierno", ha criticado.
Sin propuestas del PP
Dirigiéndose al presidente del PP, Paco Núñez, le ha dicho que todavía no ha recibido ninguna propuesta de su partido. "El plazo no es que haya acabado, pero esto requería urgencia. La que requieren autónomos, agricultores, parados y empresas a las que hay que responder"."Es importante dedicar tiempo a proponer cosas. Es más fácil estar en los bulos. No lo digo por ustedes. He intentado abstraerme de las redes sociales, pero es doloroso ver a dirigentes que en los pasillos me daban abrazos decir las cosas que han dicho de mí. Si quiere les paso un resumen", ha apuntado.
Ha desvelado además que se está "muy cerca" de conocer "quién se ha dedicado a protagonizar movimientos en masa de redes" de manera "profesionalizada, manipulando vídeos y difundiéndolos".Con todo, ha cargado contra los políticos que "usan el dolor y la muerte" para desempeñar su labor, algo que "la ciudadanía no se puede permitir", tras lo que ha dejado claro que su Administración ha hecho "todo lo que está en su mano" para resolver los problemas derivados de la crisis sanitaria.
En este punto, ha pedido tener "lealtad" con las decisiones del Gobierno central. "Hoy es Pedro Sánchez, pero mi Gobierno hubiera tenido un comportamiento de lealtad absoluta con Rajoy o con Aznar".Se ha preguntado cómo se hubiera afrontado esta crisis con la gestión que hizo el PP cuando gobernó, recordando que "quiso cerrar hospitales", además de "despedir a profesionales" o "cerrar consultorios".
Ha reparado en este punto en el convenio sanitario con la Comunidad de Madrid firmado con la expresidenta regional, María Dolores de Cospedal, en el Gobierno, que "expulsaba a ciudadanos castellano-manchegos" al sistema sanitario de la región vecina.
Valora el papel de Ciudadanos
Del mismo modo que ha criticado con dureza al PP, en su intervención en el pleno de las Cortes, el presidente castellano-manchego ha recordado que ofreció, hace unas semanas, un pacto a los partidos para la reconstrucción de Castilla-La Mancha y ha valorado "las declaraciones iniciales de los partidos parlamentarios" que se mostraron de acuerdo.
En concreto, ha dicho que Cs ha colaborado "en reuniones y ha dado propuestas que van a servir y mucho para llegar a acuerdos", sin embargo ha lamentado que del PP "todavía no se tiene ninguna propuesta".