La intervención del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, el pasado sábado en el pleno monográfico sobre la gestión de la crisis del coronavirus celebrado en las Cortes regionales ha indignado a un sector importante del sector sanitario castellano-manchego. El jefe del Ejecutivo autonómico aseguró que"no han faltado respiradores" y que en todos los hospitales de la comunidad "ha habido camas libres", unas afirmaciones con las que los médicos intensivistas de Albacete han dicho no estar de acuerdo y ya han desmentido.

Incluso, desde el Colegio de Médicos albaceteño han anunciado que encargarán a sus servicios jurídicos que estudien si las "declaraciones e insinuaciones" del presidente regional "pueden incurrir en algún tipo de ilegalidad para un cargo público", considerando que Emiliano García-Page "animó a denunciar a los profesionales que hayan alzado la voz denunciando la falta de material y a los jefes de servicio que han pedido ayuda".

Ante este clima de tensión y enfado provocado por las palabras de García-Page en el Parlamento autonómico, la presidenta del Colegio de Médicos de Castilla-La Mancha, Natividad Laín, ha remitido una carta al presidente de la región, Emiliano García-Page, para solicitarle una reunión y poder "intercambiar impresiones" al respecto de su última intervención plenaria del pasado sábado, ya que tal y como asegura se ha recibido en la institución colegial "numerosas quejas por parte de médicos" por sus declaraciones.

Según esta misiva, remitía a los medios de comunicación, la intención es mantener una reunión "lo antes posible" y con el objetivo de "evitar en lo sucesivo situaciones de malestar en el colectivo médico". "Están soportando una excepcional sobrecarga física y mental en la actual situación sanitaria", remata la carta.