La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha abogado este miércoles por fijar un protocolo estricto para los profesionales sanitarios que hagan visitas domiciliarias a pacientes con COVID-19 o que se sospeche que estén infectados con el coronavirus SARS-CoV-2.
En una nota de prensa, la presidenta del Sector de Sanidad de CSIF Castilla-La Mancha, Sacramento Rodríguez, ha considerado que para garantizar la seguridad durante la desescalada del estado de alerta declarado por la pandemia, "es clave reconocer la importancia de este primer nivel asistencial", por lo que "urge elaborar un protocolo que servirá para afrontar el actual momento y posibles nuevas oleadas".
Rodríguez ha añadido que "la visita domiciliaria constituye un punto crítico y a pesar de ello no existe un protocolo que indique los equipos materiales que se deben utilizar en cada caso ni la manera de proceder para garantizar la protección de los trabajadores y de los propios pacientes".
Asimismo, ha apuntado que en este protocolo se debe especificar si se trata de un domicilio con riesgo de exposición o si es de bajo riesgo, indicando el tipo de equipos de protección individual (EPI) necesarios en ambos casos, así como la dotación del material para cada visita incluyendo información sobre el desecho de EPI utilizados en cada una de ellas.
También se debe de contemplar la reducción al mínimo de acompañantes en el domicilio y la indicación de la estancia en la que deben permanecer, así como las medidas preventivas que deben adoptarse por parte de los residentes en la vivienda, ha señalado la presidenta del Sector Sanidad de CSIF.
Ha recordado que tras la decisión del Ministerio de Sanidad de utilizar la mascarilla de manera obligatoria en espacios cerrados y transportes públicos, así como en la calle si no se puede mantener una distancia de 2 metros, CSIF también insiste en la colocación de dispensadores de gel hidroalcohólico en los centros de Atención Primaria y en hospitales, y que sean de uso obligatorio para todas las personas que accedan al interior.
Igualmente, la central sindical propone que se establezca un aforo máximo para cada centro de salud con la intención de evitar que se acumulen usuarios en las salas de espera, además de que estos deberán ir acompañados de una sola persona en el caso de que sea necesario.
Y también plantea que se establezcan circuitos independientes de pacientes COVID-19 frente a los de otras patologías, así como que se aumente el tiempo de consultas y del resto de actividades, de manera que se posibilite la higiene de manos y la limpieza de superficies en el intervalo que media entre pacientes.
Además, ha señalado que para poner en marcha estas medidas se deben adecuar las plantillas de los centros de Atención Primaria "ante la carga de trabajo que soporta y soportará dentro de la detección precoz del coronavirus, a lo que se suma la presión asistencial del resto de dolencias".
En este sentido, Rodríguez ha destacado que es preciso contratar más profesionales, mantener el personal contratado con motivo de la epidemia, y mantener el cien por cien de cobertura de bajas y ausencias durante el periodo estival para afrontar la desescalada.