El sector de Enseñanza de la Federación de Servicios Públicos (FeSP) de UGT Castilla-La Mancha ha considerado "peligroso" no reducir el número de alumnos por aula en las enseñanzas no universitarias el próximo curso 2020/2021 como medida de contención del COVID-19 y de identificación de posibles rebrotes y ha pedido "fondos extraordinarios" a la Consejería de Educación, Cultura y Deportes.
En una nota de prensa, el sindicato ha asegurado que los planes de contingencia de cada centro educativo "no son suficientes sin otras medidas de acompañamiento".
Por ello, y tras conocer la propuesta de la Consejería para la vuelta presencial a las aulas y las directrices de la Conferencia Sectorial de la semana pasada, el responsable del sector en FeSP UGT en la región, Manuel Amigo, ha criticado que se esté "fiando" la actividad presencial del próximo curso escolar a que no haya rebrotes.
"Valoramos el regreso a la actividad presencial de todo el alumnado, pero se está confiando en que la actual situación sanitaria sea ya la definitiva durante todo el curso y no se están tomando las medidas necesarias para una vuelta estable y segura", ha añadido.
Para Amigo, el regreso requiere, "de manera fundamental", reducir el número de alumnos por aula y que estas agrupaciones no interactúen con el resto del centro, algo que había propuesto el Ministerio de Educación en anteriores semanas pero a lo que "ahora renuncia", ha lamentado, tras explicar que estableció hace semanas la recomendación de rebajar a quince el máximo número de alumnos por aula y hace unos días aumentó la cifra a veinte.
Si bien, ha recordado que después de la Conferencia Sectorial del jueves, ante la postura de las comunidades autónomas de no poder afrontar la medida con sus presupuestos, se llegó al acuerdo de no tener que reducirlo.
En todo caso, el responsable sindical ha considerado "peligroso" este cambio porque, a su juicio, "supone comenzar el curso que viene prácticamente en las mismas condiciones que el anterior", por lo que ha pedido a la Consejería "fondos extraordinarios" para acompañar los planes de contingencia de cada centro con las mejoras necesarias.
En concreto, ha abogado por un aumento del profesorado para cubrir las nuevas necesidades organizativas y educativas, de manera que se puedan aislar posibles rebrotes y evitar "a toda costa" que todos los alumnos acaben otra vez fuera de los centros, con el riesgo de aumentar la brecha digital y las desigualdades entre estudiantes.
Todo ello sin olvidar, ha dicho, las medidas de higiene de las que debe disponer y cumplir cualquier centro, y diseñando mejoras en las tecnologías y en las infraestructuras docentes para todos los escenarios sanitarios posibles.
"No podemos olvidar que nuestra región es de las que menos dinero gasta porcentualmente en su sistema educativo y, por ello, nuestros alumnos no se pueden quedar rezagados respecto a los de otras comunidades autónoma", ha concluido Amigo.