Que el verano está siendo más caluroso de lo normal es algo que los ciudadanos han ido notando en las últimas semanas. Sin embargo, nada como una valoración científica para confirmar lo que los mortales sienten en sus carnes. De este modo, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) hecho público que en Castilla-La Mancha se ha vivido un mes de julio más cálido que en la media de los años que se comprenden entre 1981 y 2010. Es lo que se conoce como anomalía técnica y que en la provincia de Toledo, el caso más extremo, llegó a ver cómo se rozaban los 3 grados de desviación.
En concreto, la AEMET estima que en la provincia de Toledo se registró una temperatura media de 29,6 grados, lo que suponen 2,9 grados de anomalía térmica respecto a lo esperado, lo que ha generado una calificación del clima como de extremadamente cálido.
Esta misma calificación ha merecido la provincia de Ciudad Real, en la que la anomalía térmica se ha situado en los 2,3 grados, para una media de 29 grados durante el mes de julio.
En una situación más moderada, lo que les otorga una calificación de 'muy cálido' al clima experimentado en julio, se sitúan Cuenca y Albacete. En este sentido, han experimentado, respectivamente, una anomalía térmica de 1,6 y 1,4 grados, para unas temperaturas medias de 25,9 y 26,5 grados en cada uno de los casos. Por su parte, los termómetros de Guadalajara arrojaron una media de 27,2 grados.