Un informe de uno de los órganos de la Unión Europea, el Comité Europeo de las Regiones, ha resaltado la labor que se ha realizado en Castilla-La Mancha durante la gestión de la pandemia. Son varios los capítulos en los que se ha puesto la lupa sobre las medidas adoptadas por la Junta para luchar contra el coronavirus en una de las zonas en las que más fuerte ha golpeado el Covid-19.
La publicación, el 'Informe sobre el Estado de las Regiones y las Ciudades de la UE' de la Comisión, se centra en analizar como se ha llevado a cabo la gestión de la pandemia por parte de las distintas entidades locales y regionales que se hallan en Europa. En este sentido, se valora la apuesta de Castilla-La Mancha por actuar en las residencias de mayores, uno de los focos más castigados por el virus y donde se han registrado el mayor número de muertes.
El informe indica que "muchas entidades locales y regionales entendieron la necesidad de brindar apoyo especial a los centros de atención para personas mayores y hogares de ancianos, para proteger del virus a sus residentes de alto riesgo". Asimismo, se pone como ejemplo a Castilla-La Mancha, que "tiene un total de 344 centros de estas características que atienden a 26.000 personas y proporcionan 15.000 puestos de trabajo".
Profundiza el texto explicando que "al principio de la pandemia, la región estableció un plan de contingencia para la atención de personas afectadas por Covid-19 en hogares de ancianos, para adoptar reformas para su atención individual si no cumplían con los criterios médicos para su ingreso en el hospital". Del mismo modo, se hace eco el informe de que "la región aprobó una inversión de 19 millones de euros para la atención de estas personas en los centros residenciales".
Sobre los equipos de protección
El informe también resalta la capacidad de las entidades locales para la adquisición de medios de lucha contra la enfermedad. En este sentido, se destaca a Castilla-La Mancha, junto a Lombardía en Italia y Sibiu en Rumanía, como regiones que aumentaron "de forma significativa su capacidad de cuidados intensivos".
Asimismo, también se cita a la región en el esfuerzo realizado para adquirir "mascarillas, desinfectantes y otros suministros" para diferentes colectivos, no sólo los sanitarios, como pueden ser los transportistas, así como para empresas, asociaciones y particulares. De hecho, se indica que Castilla-La Mancha "distribuyó de forma gratuita mascarillas que habían llegado a más de 830.000 personas en junio" de este año.
No sólo en la distribución de estos elementos se pone como ejemplo a la región junto a Kosice (Eslovaquia) o Gabrovo (Bulgaria), a la que también se destaca por su capacidad para apoyar la fabricación de estas mascarillas, equipos de protección individual y otros artículos sanitarios de índole semejante.La última mención de Castilla-La Mancha aparece en el apartado de test diagnósticos, acentuando el trabajo realizado para ser una de las primeras regiones junto a Bruselas en ponerlos en marcha.